Dos casos graves de niños atacados por perros en la vía pública, han debido llegar a pabellón por la gravedad de las lesiones.
Uno de ellos, Kevin Vera Sirón, de siete años, alumno de primero básico de la Escuela Arturo Prat, debió ser intervenido quirúrgicamente la noche del lunes y ayer en la mañana, luego que un perro lo atacara brutalmente en su rostro y cabeza.
De acuerdo a lo señalado por su padre, Juan Vera, su hijo estaba jugando y gracias a un vecino que escuchó los gritos de auxilio, lograron evitar una tragedia mayor. “Es uno de los pocos niños a los que un perro le atraviesa el cráneo. Ahora ha tenido que entrar a pabellón dos veces, ya que el médico dijo que las lesiones son de riesgo de muerte. Agradezco al vecino que lo escuchó y vio cuando el perro lo estaba atacando, sino mi hijo muere. Él había ido donde un amigo y cuando iba de vuelta a la casa, justo en la esquina, se encuentra con ese perro que salió a atacarlo. El vecino dijo que lo sacudía como un trapo y lo llevó a la casa. Ahí lo vimos que le atacó los ojos, las orejas, le mordió la cabeza. Un vecino nos trajo en su auto”.
El padre del niño herido, espera que las autoridades hagan algo con estas situaciones que comienzan a ser reiterativas, “porque alguien tiene que hacerse responsable. Si no hacen nada va a seguir ahí y después lo van a soltar como si no hubiese pasado nada y los animalistas lo defienden mientras mi hijo queda todo destruido. Él va a quedar con secuelas”.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 20.30 horas del lunes, cuando el niño retornaba a su domicilio. Al llegar a la esquina de los pasajes Monte Fitz Roy y Ventisquero La Colonia, en la Población Cardenal Reaúl Silva Henríquez, fue atacado por el can, presuntamente mascota de una vivienda en dicha intersección, a pesar que el padre de Kevin indicó que lo habrían negado. “Cuando llegó Carabineros negaron que el perro fuera de ellos. Ahora quedará en nada, igual que en otros casos. Se la van a sacar igual y quién responde por lo que le pasó a mi hijo”.
Hasta el cierre de esta edición, el menor lesionado se encontraba en la UCI Pediátrica del Hospital Clínico de Magallanes, donde permanece grave con riesgo vital, esperando que no se produzca ninguna infección que le origine una meningitis.
Otro caso
El jueves se había registrado otro caso de ataque de perro. En esa oportunidad la víctima fue un niño de dos años que fue atacado en el rostro por un animal, del que también se desconoce si tiene dueño, a pesar que los vecinos indicaron que era alimentado por una vecina en calle Tucapel. Tras ser dado de alta, Dante Ampuero Vargas se mantiene con tratamiento debido a la gravedad de las heridas. “Le han revisado las heridas y el jueves (mañana) le van a sacar los puntos. Luego del ataque mi hijo quedó traumado, por lo que deberá ser ingresado a pabellón para sacarle los puntos. No quiere entrar a la consulta, se arranca. Ahí uno se da cuenta del trauma que le generó esto”. Así lo indicó Solange Vargas, madre del niño.
La mujer aprovechó de llamar nuevamente a las autoridades para legislar estos temas: “Enviaré una carta a los parlamentarios para que escuchen y hagan algo. Nadie ha dicho nada y no dan respuestas”.
Respecto a los responsables, la madre indicó que fue al domicilio donde se encontraba el perro, pero que ya no está, por lo que al igual que el caso anterior teme que quede impune.
Fiscalía
Sobre la investigación de estos casos y posibles sanciones, el fiscal jefe de Punta Arenas, Eugenio Campos, indicó que se están recabando los antecedentes respecto a estos hechos. “Acá pueden haber varias figuras en juego, partiendo de un delito falta que sanciona nuestro Código Penal respecto al responsable de animales que lo deja suelto y que puede ocasionar lesiones a las personas. Sin perjuicio, puede haber también una figura cuasidelictual, vale decir una negligencia o culpa en la tenencia que origina el cuidado debido de un animal y que puede causar en definitiva las lesiones, que lamentablemente en estos últimos días se han producido respecto a menores de edad. La Fiscalía debe indagar, y estamos investigando. Precisamente tenemos algunos responsables, donde se debe precisar el carácter de las lesiones y hacer los requerimientos al tribunal respectivo, arriesgando multas y hasta sanciones privativas de libertad”.