En una acción desinteresada, motivada exclusivamente por el encanto que genera en los visitantes el Parque Nacional Torres del Paine, los estadounidenses Richard Braunlich y su esposa Cristine, cumplieron hace pocos días el sueño de entregar al parque un donativo que beneficiará a los miles de turistas y a los propios guardaparques.
Se trata de la pasarela Guardas, ubicada en la segunda quebrada del circuito Macizo Paine, también conocido como “O”, considerado uno de los lugares de más difícil acceso.
Según informó el sitio Prensa Antártica, el matrimonio reunió los fondos necesarios en su país durante un año y posteriormente, con la ayuda de otros voluntarios y el propio personal de Conaf en el lugar lograron construir el puente colgante, el que entregará mayor seguridad para todos quienes transiten por la zona.
Con un costo total de 20 mil dólares y elaborado en madera de lenga, se espera que el puente tenga una vida útil de más de 20 años y mejore sustancialmente la seguridad de los visitantes y guardaparques.
El Superintendente Parque Nacional Torres del Paine, Federico Hechenleitner, señaló que esta es la primera vez que recibe una donación de este tipo. “Estamos muy agradecidos de Richard y Cristine, hicieron un gran esfuerzo para venir hasta aquí y trabajar junto a los voluntarios”.
La importancia de esta nueva obra, es vital para unir la quebrada que posee una profundidad de 45 metros y una extensión de más de 50 metros, los que con la lluvia y los deslizamientos cada año van en aumento