Estremecedores detalles se conocieron ayer durante la audiencia de formalización de cargos del ciudadano dominicano detenido luego que llegara grave al Hospital Clínico llevando en su estómago 44 ovoides con cocaína.
Justamente en dicho recinto asistencial, más precisamente en la Unidad de Tratamiento Intensivo, donde permanece internado, se desarrolló ayer la audiencia, donde la Fiscalía dio a conocer los antecedentes que dan cuenta de la responsabilidad en un delito de la Ley 20.000 de Miguel Aneudy Rodríguez Álvarez, de 28 años.
Fue poco después de las 10.30 horas cuando los intervinientes ingresaron al hospital para dar inicio a la audiencia, donde el fiscal antinarcóticos Manuel Soto le indicó al ciudadano extranjero que se iniciaba una investigación en su contra por los hechos que quedaron al descubierto cuando el pasado viernes, aproximadamente a las 3.15 horas de la madrugada, llegó hasta la unidad de Urgencias del Hospital Clínico de Magallanes solicitando atención médica de emergencia por tener en su zona estomacal droga que había ingerido días anteriores. Ante esto, el imputado fue trasladado para ser intervenido quirúrgicamente, extrayéndole la cantidad de 44 cápsulas que en el interior mantenían una sustancia que al ser sometida a la prueba de campo arrojó presencia de clorhidrato de cocaína, la que alcanzó un peso total de 570,2 gramos.
En la audiencia,  el abogado defensor Guillermo Ibacache solicitó que el tribunal se declare incompetente para abordar la causa, principalmente porque el principio de ejecución del delito habría sido en Argentina. “El ciudadano dominicano, con residencia en Argentina, fue formalizado por el delito de tráfico de drogas. La defensa solicitó que el tribunal se declare incompetente porque las normas penales aplicables al caso son que los tribunales competentes son donde se tuvo principio de ejecución del delito, en este caso la ingesta de los ovoides se realizó en Buenos Aires, Argentina. Ahí tomaron un avión hasta Río Gallegos donde, vía terrestre en un bus, llegaron a Punta Arenas sin ningún problema y se instalaron en un domicilio acá. Esta persona al no poder expulsar los ovoides estuvo algunos días con estos elementos en su interior y uno de estos se rompió y tuvo que trasladarse de urgencia2.
Pese a lo expuesto, la solicitud de la defensa fue rechazada, abriéndose un plazo de apelación de cinco días.
El testimonio del detenido
El propio imputado entregó su testimonio a la PDI, la cual fue citada en audiencia. En ella señala: “Soy peluquero y tengo una familia compuesta por mi mujer y cuatro hijos en la ciudad de Buenos Aires. Nunca he estado sometido a procesos judiciales en otros países ni en Chile. Puedo señalar que hace dos semanas, aproximadamente, un sujeto que conozco me ofreció 1.200 dólares para trasladar ovoides y que debía tragármelos para trasladarlos a un destino que no conocía. Por mi mala situación económica acepté su propuesta. Tomé un avión desde Buenos Aires, donde ingerí los ovoides con droga acompañado de esta persona, quien estuvo conmigo durante todo el viaje. Al llegar a Río Gallegos tomamos un bus y nos dirigimos a Punta Arenas, siendo primera vez que entro a Chile”.
Agrega que “en Punta Arenas llegamos a una casa, que este sujeto me dice que es suya. Estuve dos semanas en esa casa con él, lugar que creo utiliza para descargar a los sujetos que traen los ovoides. Durante el tiempo que estuve en el domicilio no logré evacuar los ovoides, por lo cual esta persona me amenazaba ya que quería la droga que tenía en mi interior, porque los sujetos que con él trabajan lo estaban presionando. El 19 de enero fui a realizar un trabajo de reparación a una mujer paraguaya que conocí, y estando en el centro de la ciudad sentí una puntada en el estómago, retirándome a la casa donde me estaba quedando, tomando un colectivo. Me sentí muy mal y luego decidí salir, no podía comer. Al día siguiente, cerca de las 3 de la mañana, tomé un taxi y llegué al hospital, donde desconozco por qué el taxista se llevó mi teléfono, ya que no lo conozco”.

Otras declaraciones
Entre otras declaraciones que se dieron a conocer ayer, está la de una secretaria del recinto médico, quien señaló que alrededor de las 3.15 horas de la madrugada del viernes llegaron a la unidad de Urgencia dos individuos, uno de ellos saltando y gritando que estaba intoxicado con cocaína, mientras otra persona que lo acompañaba decía que era taxista y que no lo conocía, pero tenía acento extranjero, argumentó la testigo. Sin embargo, la mujer indicó que extrañamente el acompañante del imputado le pidió el teléfono celular para que le avise a sus amigos de su estado, retirándose del lugar con el aparato telefónico.
El imputado quedó con la medida cautelar de prisión preventiva, la cual deberá comenzar a cumplir en la cárcel de Punta Arenas una vez que sea dado de alta del Hospital Clínico de Magallanes, permaneciendo bajo custodia de personal de Gendarmería. El plazo para el cierre de la investigación se fijó en 90 días.
Al término de la audiencia el fiscal del caso, Manuel Soto, señaló que “(al imputado) se le formalizó por un delito de tráfico de drogas y la información que tenemos en esta etapa incipiente es que esta persona llega acompañado de otra en estado crítico. La intención del imputado es colaborar”.
Por otra parte, el fiscal no descartó que este caso guarde relación con el hecho anterior registrado hace algunas semanas y donde también se vio involucrado un ciudadano extranjero, quien permanece en prisión preventiva.
Por su parte, el subcomisario de la PDI Milton Bazán, señaló que el imputado ingresó al país el pasado 7 de enero por el paso fronterizo de Monte Aymond.