Torres del Paine es el destino turístico número uno de la Patagonia, con un aumento exponencial de visitantes nacionales y extranjeros que cada año colapsan las reservas para ir a conocer los macizos.
Y pese a ello, en la Asociación de Hoteles y Servicios Turísticos de Torres del Paine (HYST) no hay conformidad, principalmente con el rol del Estado. Su presidente, Sebastián Gómez, manifestó las principales aprehensiones.
- ¿Cómo es la inversión privada en Torres del Paine?
“Hay un aumento fuerte. Más metros cuadrados construidos, más personal, más vehículos de transporte. El tema de la naturaleza ayuda, pero somos conscientes de que si no es avalado por infraestructura y calidad hotelera, la gente no seguiría viniendo”.
- El parque capta recursos a través de la entrada. ¿Cómo ha sido ese retorno por parte del Estado?
“Considerando la cantidad de hectáreas de parques nacionales, lo que entra en la zona debería quedar 100% en Magallanes. Torres del Paine produce al año más de 3 mil 500 millones de pesos que se van a Santiago, y estamos hablando que retorna cerca de $ 400 millones para la operación, que es muy poco para la necesidad que tenemos. El Paine está financiando todos los parques nacionales de Chile”.
-¿Conaf es el responsable?
“Esta es una visión país, Conaf no puede hacer mucho más. El Estado debe entender que es necesario invertir en los parques nacionales, porque es la única forma de que el turismo sea sostenible en el tiempo. Con recursos tú le das seguridad ambiental, sustentabilidad, etc. Por ejemplo, Sernatur tiene un fondo de promoción de 4 mil 900 millones de pesos para la zona, y el presupuesto de Conaf Magallanes va en el rango de los 2.100 millones de pesos para toda la región. Entonces estamos vendiendo sin dar soporte a lo que vendemos”.
- Entonces es un tema político… En un año de elecciones.
“Es visión de Estado. Es decir, dentro de las prioridades de Gobierno, ¿en qué número pones esto?”.
- ¿Cuáles son las necesidades más urgente que tiene Torres del Paine?
“El parque necesita regularización de todo lo que son las instalaciones de Conaf: más baños públicos, guardaparques caminando en sendero, mejor señalética, protocolos de seguridad, implementos de rescate, etc. Con el personal que existe da para quedarse en las guarderías, pero no para andar patrullando las zonas. La gestión de Conaf Magallanes con el presupuesto que tiene es fuerte, pero no es suficiente”.