Unos quince millones de pesos de inversión permitirán que los residentes de las poblaciones “Alta Vista” y “Archipiélago de Chiloé” accedan a un grado mayor de seguridad.
¿Por qué? Porque, como lo dio a conocer el alcalde Claudio Radonich, los vecinos serán beneficiarios de la adquisición, instalación y funcionamiento de las llamadas “alarmas comunitarias”, importante herramienta en la prevención de hechos delictuales en ambos sectores residenciales del sector sur poniente de Punta Arenas.
En total serán quinientas ochenta las alarmas comunitarias con las cuales contarán esos vecinos, quienes, en su oportunidad, plantearon a la primera autoridad comunal y su equipo de trabajo, la necesidad de lograr un grado mayor de seguridad ciudadana, con el apoyo municipal y de otras entidades vinculadas a esa inquietud vecinal.
La inversión en cuatrocientas ochenta alarmas comunitarias para el sector de la población “Archipiélago de Chiloé”, ascendió a la suma de nueve millones novecientos setenta y tres mil trescientos setenta y seis pesos.
Por su parte, la Población Alta Vista, recibirá un total de cien alarmas, cuyo costo asciende a los cuatro millones novecientos cuarenta y cinco mil ochocientos setenta y seis pesos.
Esos fondos provienen del seis por ciento que el Fondo Nacional de Desarrollo Regional, FNDR, destina a este tipo de iniciativas.
Ambos proyectos fueron iniciativas de la Secretaría Comunal de Planificación municipal, SECPLAN, y permitirá que los vecinos, al manejar adecuadamente el sistema, contribuyan a lograr un mayor nivel de seguridad ciudadana en dos sectores que, en algunas ocasiones, han sido escenario de hechos lamentables que generan inseguridad entre los vecinos.
Existen planes para dotar de una mejor iluminación pública a distintos lugares de la comuna y, mediante el retiro de los vehículos abandonados en la vía pública, privar de refugio a elementos antisociales, delincuentes, borrachos y drogadictos, cuyas andanzas pueden ser disuadidas, aunque sea en parte importante, si existe una iluminación pública adecuada y se eliminan las “caletas” donde se reúnen los antisociales antes de cometer sus fechorías.
Otros vecinos, como los que residen en sectores residenciales como el “Portal del Estrecho”, en el sector sur, o en el condominio ubicado entre las avenidas Bulnes y España, a la altura de Manantiales, hace ya tiempo y una vez que sufrieron la embestida de ladrones y pirómanos, respectivamente, se organizaron para crear organismos de autoprotección vecinal que, hasta ahora, parecen haber sido exitosos y han contribuido a mejorar los niveles de la seguridad de los propios vecinos, no sin aportes materiales y con mucho esfuerzo, lo cual ha sido valorado positivamente por las autoridades y los propios residentes en esos sectores.