El presidente regional de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), Alejandro Kusanovic, declaró ayer que “si ENAP no logra bajar sus costos a tres o cuatro dólares por millón de BTU, lo mejor sería poner una termoeléctrica, para seguir generando energía para Magallanes y dejar de generar pérdidas financiadas con el dinero de todos los chilenos”.

El dirigente gremial hizo estas declaraciones, luego que el Gobierno resolviera disminuir en un 12% el aporte presupuestario que hace a ENAP para financiar el subsidio al consumo de gas domiciliario de Magallanes, situación que generó airadas reacciones de diversos actores regionales.

Altos costos

Para el presidente de la CPC, esta disminución hace poca diferencia en los cuantiosos recursos que el Estado ha destinado a esta empresa en los últimos tres años y que suman 300 millones de dólares anuales, de los cuales 100 millones corresponden al subsidio y 200 millones a exploración.

Kusanovic recordó que los costos de la empresa son por ahora poco competitivos de la estatal hacen que las inversiones en esta empresa resulten en una inversión excesivamente costosa para el Estado, sobre todo, a largo plazo. “Es una situación muy complicada la que se está viviendo actualmente con ENAP, puesto que están operando con costos en torno a los 8 dólares por millón de BTU y resulta que tienen que venderle a Methanex por 3,6 dólares el millón de BTU”.

Cambio de matriz

A su juicio, el problema de fondo es aún más grave. “La verdadera pregunta es si vamos a llegar en algún momento a tener costos por un valor tres o cuatro dólares, porque si no llegamos a eso, quiere decir que o tenemos que cambiar nuestra energía base en Magallanes e irnos al carbón, es decir, generar electricidad con carbón y cambiar la matriz de generación de la electricidad en esta región”, indicó.

Agregó que a pesar de la alta inversión estatal en la materia, “hasta ahora, no hay ninguna papa pelada. En contraste, dijo, una termoeléctrica con 200 MW de potencia en una región como Magallanes rica en este recurso, costaría US$200 millones y otros 100 ó 200 millones el cambio de matriz eléctrica. “Es decir, si usáramos esos 900 millones de dólares que hemos gastado en subsidio, nos quedarían casi 500 millones para regalar electricidad”.

Inconstitucional

El dirigente gremial criticó además cómo ha operado la política de subsidios por parte del Estado. “Lo otro grave es que el Estado incentivó la participación de privados en los CEOP en busca de gas y petróleo y resulta que no los hace participar en el tema del subsidio. Esto, en definitiva, no es un subsidio al gas sino que se ha transformado en un subsidio a ENAP”.

Por ello, a su juicio, la política de subsidios en esta materia debiera operar sobre una base totalmente diferente. “Lo que debiera hacer el Estado es licitar estos recursos y entregárselos a quien ofrece gas a un menor precio. Hay muchos privados que están dispuestos a ofrecer gas a un menor precio que ENAP e incluso a explorar la búsqueda de gas, pero el Estado no lo hace participar con el subsidio. Creo que el subsidio debiera estar disponibles tanto para empresas públicas como privadas, pues incluso el mecanismo actual podría ser calificado como inconstitucional. Se han gastado 900 millones de dólares de todos los chilenos sin una licitación transparente y eso sí que es grave”.