Un gran problema se suscitó tras las declaraciones del Gobernador de Valparaíso, Jorge Dip, quien no quiere autorizar el desarrollo con público del duelo entre Everton y Colo Colo, en la próxima fecha del torneo nacional de fútbol. La autoridad aseguró que el Estadio Sausalito no tiene las medidas de seguridad suficientes para recibir un partido de esta convocatoria.

“A mediados de octubre oficiamos a Everton, a la ANFP y al municipio sobre las falencias en medidas de seguridad que tiene el estadio Sausalito y que ya veníamos planteando hace dos años. De no estar cumplidas esas obras el día 20 de noviembre no nos encontramos en condiciones de autorizar el partido”, reconoció Dip, agregando que “esta cuestión se está transformando en un show de payasos. Llamo a la seriedad de la sociedad anónima”.

Desde Everton no recibieron bien las palabras de la autoridad y aseguraron que en el club han hecho de todo para mantener una buena relación con la gobernación. “Desde la llegada de Grupo Pachuca al club hemos hecho un gran esfuerzo institucional y deportivo, que hoy nos permiten llegar al final de este torneo con el nuestro sueño intacto. Tenemos el apoyo de nuestra gente, tenemos el compromiso de nuestro cuerpo técnico y jugadores y tenemos el reconocimiento público de la ANFP por jugar en Sausalito (...) El señor Gobernador le faltó el respeto a todos los evertonianos, nos calificó de payasos, creando un ambiente hostil y no de unidad como lo obliga su cargo. No entendemos cómo un director de Blanco y Negro SA llega a su despacho para poder ejercer presión para no jugar el partido en Sausalito”, respondió el presidente de Everton, Pedro Cedillo, en lo que se transformó en un ir y venir de declaraciones.