Hy se cumplen 19 días desde el horrendo doble homicidio perpetrado en plena vía pública de las localidad argentina de Las Ovejas, en Neuquén, los mismos que que su autor sigue prófugo de la justicia.
Mientras las diligencias ordenadas por la justicia se mantienen, considerando rastreos y allanamientos, se conocen nuevos antecedentes que son parte de la investigación y que dan cuentan de la red de protección que Lorenzo Muñoz tiene para seguir huyendo de la policía.
De
acuerdo al diario lmneuquen.com, la detención de dos de sus cuñados han
permitido arribar a la convicción de que Muñoz es miembro de una
familia bastante unida, nacida y criada en Las Ovejas, y que protege a
cada uno de sus integrantes por cuestiones culturales respondiendo
a firmes códigos rurales.
A ello se suma el conocimiento que tienen del
territorio, lo que le ha permitido al prófugo desenvolverse
sin problemas en el sector rural, hasta donde las policías han llegado
acompañados de perros especializados en la detección de personas.
Tampoco se descarta que el sujeto haya abandonado la provincia con dirección a Chile, aprovechando algún paso no habilitado, razón por la cual también se incrementó la fiscalización en frontera.
En cuanto a la recompensa que ofrece la Provincia (equivalente a más de 15 millones de pesos chilenos), en la central de comunicaciones se han recibidio alrededor de 10 llamados, ninguno aportando un dato válido a la hora de salir a la búsqueda de Muñoz.
El hecho
Mientras
tanto, la Provincia de Neuquén se mantiene convulsionada por el doble
crimen y la fuga de su autor. Vecinos han salido a las calles para
manifestarse pidiendo justicia, efectuando marchas en medio de gritos,
cánticos y acompañados de pancarta.
Por su parte, la familia de las víctimas han expresado su dolor por el fracaso en la búsqueda de Muñoz, apuntando principalmente a la presunta intervención de la Iglesia en la protección del prófugo y a un deficiente actuar de la policía. De hecho el Tribunal Superior de Justicia de Neuquén se encuentra evaluando el desempeño del personal judicial de la quinta circunscripción y determinará “si se sujetan a la observancia de sus deberes a cargo”.
Por esta razón, el TSJ como máxima autoridad del Poder Judicial, dispuso la instrucción de sumaria información, “a fin de indagar y en su caso esclarecer, si existe mérito para abrir el respectivo procedimiento disciplinario en contra del algún miembro del Poder Judicial”.
El horrendo crimen se registró el pasado día 22 de febrero cerca de las 13 horas, cuando al regreso de la escuela la pequeña Valentina, de sólo 11 años, y su madre Karina, pareja de Muñoz, fueron interceptadas por éste en plena vía pública y ante la mirada de testigos. Luego de una breve discusión el sujeto extrajo un cuchillo con el que agredió primero a la menor y luego a la madre.
Una de las testigos del hecho relató, a través de las redes sociales, lo vivido: “A cincuenta metros adelante mío iban Karina con Valentina. En un momento empiezo a escuchar gritos. Cuando me acerco a ver era Lorenzo Muñoz que las estaba golpeando, la tenía a la nena agarrada de los pelos. Karina le gritaba ‘No, Lorenzo, no’”.
“Ahí él le pegó una puñalada en las costillas. En ese momento vi que tenía un cuchillo, él me vio y yo salí corriendo aterrada. Fui a la casa de una amiga y llamé a la policía. Horas más tarde me enteré que ambas estaban muertas”.
La fiscal jefe Sandra González Taboada señaló que, al momento del crimen, Muñoz no tenía ninguna denuncia en contra por violencia familiar y que las medidas de restricción eran para proteger a la niña, quien -de acuerdo a los antecedentes- venía siendo víctima de agresiones sexuales.
La familia de Karina y Valentina se presentó así como querellante en la causa y es representada por Gisella Moreira, militante de la Agrupación de Mujeres Plenario de Trabajadoras. En principio, la querella solicitó el retorno de la documentación donde constan las varias denuncias por abuso sexual que habían conducido a la restricción perimetral de Muñoz.