Por fin el Liceo Industrial Armando Quezada Acharán logró destrabar completamente sus conflictos y normalizó su situación.

Lamentablemente, si no se vuelve a clases normalmente es porque hoy comenzó un paro a nivel comunal, convocado por el Colegio de Profesores (ver página 4).

Los 35 profesores y funcionarios que no apoyaban la toma que concluyó el pasado domingo, mantenían un paro de “brazos caídos” en defensa de los dos docentes que ocupaban los cargos de jefa de UTP y jefe de Producción.

Afortunadamente, durante la jornada de ayer, representantes de este grupo, que asegura ser el 70% de quienes trabajan en el establecimiento, dieron la movilización por “terminada” gracias a una reunión que sostuvieron con la Corporación Municipal de Punta Arenas y que los dejó “conformes”.

Luego invitó a que en el futuro se solucionen las diferencias hablando sobre ellas y no “utilizar a los alumnos” y mostró su preocupación por la falta de información que tiene la comunidad escolar sobre los conflictos que aquejaban al plantel.

Otro dato que sumó el grupo de profesores en paro fue que tenían antecedentes de que el concejal José Aguilante habría recibido un pago “por motivos de publicidad”, por lo que su función como ministro de fe del término de la toma era “cuestionable”.

La revelación fue acompañada del documento en que consta que hubo un pago por 100 mil pesos por concepto de una transmisión especial televisiva, con fecha 4 de agosto de 2017.

Ante la acusación, Aguilante declaró a Diario El Pingüino que sus funciones de comunicador social las desarrolla “por más de 40 años” y que, “al parecer los profesores que no participaron del paro ahora están tomando represalias contra este concejal, como una clara maniobra política para desacreditar a quienes no piensan como ellos. Y esto de la manera más vil”.

La solución

El fin del conflicto se selló a través de un acuerdo entre la Cormupa y los profesores, en el que se fija un puesto “rotativo” para el cargo de jefe de Producción, el que se irá fiscalizando y evaluando oportunamente.

Cabe señalar que María Angélica Oyarzún y Ricardo Villarroel, a quienes los alumnos pedían que se alejaran de sus funciones en el petitorio, aceptaron voluntariamente ser reubicados en otros establecimientos.

Jornada de reflexión

Ayer se desarrolló una jornada de reflexión en el liceo, con la finalidad de “restituir confianzas” que se han visto afectadas con los últimos acontecimientos.

Después de esta pausa, las clases se reanudarían, pero a las 10 de hoy comienza el paro comunal de profesores.