Desde las 11 horas de ayer, comerciantes y trabajadores aprovecharon la tregua en las precipitaciones para llegar hasta sus locales para cuantificar las pérdidas y realizar la limpieza de los distintos puntos de venta. Durante un recorrido realizado cerca del mediodía por calle Bories era posible observar cómo los trabajadores y locatarios de los distintos locales comerciales comenzaban con los trabajos de limpieza, baldeando los locales para sacar el barro.
Jaime Maynard llegó pasadas las 11.00 horas a limpiar la tienda de ropa ubicada en Bories 869, a pesar del barro que entró al local asegura que las puertas contuvieron un poco el lodo. Mientras trabajaba comparó esta inundación con la de mayo de 1990 asegurando que las consecuencias de esta fueron mucho peor que la de la ocasión anterior.
Una situación similar es la que atraviesan los locatarios de la Galería Palace, que producto de las precipitaciones se inundó la sala de calderas del recinto. Diana Abu Gosh, administradora del recinto, explicó que “aún no tienen claridad de cómo vamos a empezar a operar porque el barro que está en la calle no es materia que podamos limpiar. Nosotros ya limpiamos nuestra vereda, pero lo que está en la calle es demasiado lo que está en la calle son como 15 ó 18 centímetros de barro y hay que limpiarlo con maquinaria (José Menéndez)”. Agregó que desconocen qué medidas se van a tomar y aseguran que necesitan habilitar la calle.
Locatarios y comerciantes de calle Bories temen que se retrasen las obras de reparación de la arteria y recalcaron que necesitan la apertura de calles.
Otro punto de la comuna que se encuentra complicado es el Mercado Municipal. El vocero de los locatarios, Ademir Martínez, explicó que se encuentran totalmente paralizados, ya que la costanera está llena de agua. “Pero aquí hay responsabilidades bien claras, esto no debería pasar más allá del daño de los equipos. Acá debió haber un guardia y no lo había”, dijo.
Afirma que las pérdida son cuantiosas, que en su mayoría corresponden a las pescaderías. Además, señala que aún no se sabe específicamente de cuánto es el valor de las pérdidas.
Arturo Aliaga, de la Cámara de Comercio y Turismo, reconoció que aún no se maneja un catastro, pero que hay cuantiosas pérdidas, sobre todo en locales comerciales “chicos”. Agregó que el sector del turismo también se ha visto seriamente afectado, no sólo por las pérdidas y por los días no trabajados, sino que también por la gente que deja de llegar a la comuna.
Producto de las serias inundaciones, Movistar ha debido realizar el cierre temporal de su sucursal ubicada en Bories esquina Colón. Por lo que las atenciones y consultas de clientes podrán ser canalizadas a través del Call Center 600 600 3000.
Para tranquilidad de los clientes, la compañía no suspenderá los servicios a clientes con boletas vencidas durante esta semana y extenderá el plazo hasta el 20 de marzo.