La sustracción de especies se remonta al 29 de agosto del año pasado, cuando la banda, previamente organizada, ingresó a Ripley, en el Mall Espacio Urbano Pionero donde efectuaron maniobras distractivas de las medidas de recaudo, como obstaculizar la visual de las cámaras de seguridad. Simularon ser clientes y procedieron a sustraer 30 camisetas deportivas y se fugaron.
Hay otros dos delitos consignados en la acusación en contra de Ripley y Falabella, en uno de los cuales sacaron ropa en un coche de bebé, que tapaban con una manta.