Esteban Alvarado Cahuas ingresó ayer cerca de las 9.00 horas a la unidad de pabellones del Hospital Clínico de Magallanes para ser sometido a una operación que se encontraba programada y que apuntó a la incorporación de una malla de titanio para reforzar la zona del cerebro afectada luego de recibir en violento golpe.
Ayer, su padre Pedro Alvarado se mostró tranquilo por la evolución favorable que ha tenido su hijo, “porque ya está retomando su vida normal, siendo lo principal su regreso a los estudios, los mismos que se vieron interrumpidos luego de la agresión”.
Asimismo, agradeció el apoyo de los amigos y comunidad en general, “quienes nos han acompañado durante todo este tiempo en la recuperación de Esteban”.
Alvarado Cahuas fue agredido brutalmente con un bate de béisbol, la madrugada del 16 de octubre de 2013, en la intersección de calle Roca y Lautaro Navarro, a escasos metros de la Plaza de Armas Benjamín Muñoz Gamero, en Punta Arenas.
Mientras el presunto agresor, un joven de 18 años, fue detenido, formalizado y enviado a prisión preventiva, la víctima ingresó al Hospital Clínico de Magallanes con un traumatismo encéfalo craneano que lo mantuvo con riesgo vital y lo llevó a permanecer 29 días en la UCI.
El alta de Esteban Alvarado se espera para las próximas horas.