A mediados de septiembre, en Río Gallegos se reunieron autoridades transandinas, productores ganaderos y técnicos en la materia para participar en la presentación de la propuesta del Plan Provincial de Manejo del Guanaco, para la Provincia de Santa Cruz.
La iniciativa elaborada por distintos organismos del sector agrario argentino busca ser la norma que garantice un uso sustentable de los recursos provenientes del guanaco, asegurando la continuidad de las poblaciones de esta especie y la conservación de los pastizales de Santa Cruz.
“El Plan Nacional de Manejo del Guanaco que se hizo en 2006, sólo contempló la recuperación de la fibra mediante esquila fundamentalmente en cautiverio. Éste no contemplaba nada respecto a la potencial utilización de la carne”, explica el presidente de de la Sociedad Rural de Río Gallegos, Miguel O’Byrne.
La nueva propuesta incluye esta posibilidad, teniendo en cuenta que la población de guanacos en la provincia es cercana a un millón, de acuerdo al último censo aéreo realizado en la zona en 2013. La medición ejecutada diez años antes arrojó una cifra aproximada de 250  mil ejemplares, lo que indica que el aumento de la población ha sido exponencial y ha provocado una sobrepoblación de la especie. 
“Al no tener un plan de manejo, no ha habido ningún control sobre la evolución de la especie, y ha generado un impacto negativo en el equilibrio socioeconómico de la provincia. Fundamentalmente afecta el consumo de pastizales del suelo, que es el principal recurso que tiene esta provincia”, sostiene O’Byrne.
Es por eso que el plan en el que también participa la Sociedad Rural de Río Gallegos, permitiría crear un nuevo recurso económico para la zona que, a la vez ayudaría a recuperar su otro gran recurso.
“El plan contempla la utilización del recurso y habilita los mecanismos para poder hacer encierre, juntas de animales y potencial envío a frigoríficos para ser faenados y, por otro lado,  esquila y volver a soltarlos a la naturaleza. Por supuesto que los primeros años habrá algunos mecanismos de control experimentales para ver cómo evoluciona la dotación de guanaocos”, explica el presidente de la sociedad rural transandina.
Aplicación en Chile
La problemática de la sobrepoblación de guanacos, también se vive en Chile, más en específico en Tierra del Fuego. Es por eso que los ganaderos de la provincia consideran positiva la iniciativa argentina, como medida de control.
En el caso específico de esta zona de la Región de Magallanes, se permite la captura de aproximadamente 4.000 ejemplares al año para faenarlos y comercializar la carne. “También hemos planteado eso de buscar alternativas de producción diferentes, para poder aprovechar algunos de los productos derivados del guanaco, como la piel y el pelo, como le llaman”, comenta el presidente de la Asociación de Ganaderos de Tierra del Fuego, Rodrigo Filipic.
Pensando en que se determine con mayor exactitud la población de estos animales en la región y se realicen los estudios correspondientes, Filipic plantea que “puede ser un mercado con demanda. En Magallanes hay hartos restaurantes que tienen en su menú carne de guanaco y otras exóticas y pienso que podría ser una alternativa importante y si podemos también llegar a comercializar el pelo que dicen que es una fibra muy cara, sería un sistema bien interesante. Si se hace una buen control y manejo del guanaco, sin bajar la dotación, se puede hacer una actividad rentable”.
Sin embargo, los ganaderos saben que en Chile la aplicación de un plan del estilo argentino es complicada. “Habría que hacer un programa para diferenciarse del resto de Chile, porque en otros lugres hay pocos guanacos. Eso le estamos pidiendo hoy día a las autoridades, pero ellos ven difícil cómo abordarlo. Si se quiere hacer un programa responsable tiene que haber una captura y comercialización, no es llegar y desaparecer los guanacos, es tal vez aprovechar, hacer algo sustentable”, concluye Filipic.