Uno de los directores de una ola de libertad y protesta en la Checoslovaquia comunista de los años 1960, antes de huir de su país y triunfar en Hollywood.
Forman falleció el viernes rodeado de su familia tras una breve enfermedad, dijo su mujer según medios checos.
Durante los años 1960 Forman se posicionó como director de la disidente Nueva Ola checa, con tres comedias clásicas: “Pedro el negro”, “Los amores de una rubia” y “¡Al fuego, bomberos!”.
Forman, que trabajaba con actores no profesionales, contó en una ocasión que su estrategia al rodar películas era que todo el elenco debía divertirse.
La primera película de Forman en Estados Unidos, “Juventud sin esperanza” (1971) también se rodó con actores no profesionales pero no logró impresionar a la audiencia no europea.
Su siguiente película, “Alguien voló sobre el nido del cuco” o “Atrapado sin salida” (1975), protagonizada por Jack Nicholson, fue un éxito de crítica y audiencia, y le valió a Forman su primer Oscar como mejor director.
A continuación llegaron “Hair” (1979), un musical sobre hippies opuestos a la guerra de Vietnam, y “Ragtime” (1981).
En 1983 Forman rodó “Amadeus” con un elenco estadounidense, donde fue recompensado con un segundo Oscar a mejor director. En total, fueron ocho estatuillas de 11 nominaciones.
“Un director es un poco de todo, un poco escritor, un poco actor, un poco editor, un poco diseñador de vestuario”, dijo Forman una vez.