Desde que se iniciara el estallido social en Magallanes, son tres los templos religiosos que se han visto afectado por los desmanes ocurridos en Punta Arenas.

Los lugares son la parroquia Santa Teresa, ubicada en la Población Alfredo Lorca, la gruta de Sampaio, donde a la virgen le sacaron el rostro y la Catedral de Punta Arenas.

Estos hechos de violencia han obligado a la Iglesia a resguardarse de los desmanes que puedan ocurrir y por lo cual han puesto latas o mallas en sus ventanales que les impidan provocar algún daño mayor en las iglesias.

Diario El Pingüino, conversó con el obispo de Magallanes, Bernardo Bastres, quien manifestó que es la autoridad civil la que debe resguardar el orden público y que es deber de ellos por Constitución.

El religioso, además indicó que “nosotros lo hemos dicho desde el principio, que la situación de Magallanes es distinta al resto del país. Primero hemos tenido tres atentados, en la iglesia de Santa Teresa, luego a la gruta de Sampaio y a la Catedral, pero no hay que confundir las demandas sociales con este grupo de personas que andan haciendo desmanes y yo he dicho que es responsabilidad de las autoridades el que vuelva de nuevo el orden a la ciudad. Son las autoridades que tienen las atribuciones que la constitución les da para ver el orden público, no somos nosotros los que vamos a hacer investigación y averiguar y dar a conocer nuestra opinión. La única opinión que hemos dado es que no debemos confundir con la gran mayoría que se ha manifestado de forma pacífica tratando de buscar un país más justo, más equilibrado, más igualitario, a una situación de algunos que han hecho desmanes y que han caído en la delincuencia. Ahora yo insisto el que tiene la responsabilidad de hacer análisis, de buscar y ver eso es a la autoridad civil, a ellos les corresponde por constitución de velar por la seguridad de todos”.

Finalmente, monseñor Bastres manifestó que “los atentados contra la iglesia, se han visto también como una falta a un derecho fundamental que es la libertad religiosa”.

El obispo de Magallanes, Bernardo Bastres, se refirió al vandalismo ocurrido en Punta Arenas.