En las próximas horas nos acercamos a uno de los momentos más trascendentes de los últimos tiempos de nuestra República, quizás, sólo comparable por el sí y el no en el plebiscito de 1988 y por consecuencia el retorno a la democracia.
Llevamos años escuchando la injusticia de las que fueron sometido los miles de estudiantes y su obligatorio endeudamiento para poder ser profesional. Sabemos las historias donde una y otra vez la señora de más escasos recursos no logró solventar una enfermedad catastrófica, donde terminó falleciendo y su familia con el agua hasta el cuello. Y así, los casos se repiten una y otra vez.
Claro, lo que sucederá mañana es una oportunidad única donde los hombres y mujeres, hijos de este país, los que tienen derecho a voto, se podrán expresar libremente para saber si la ley más importante que nos rige la mantenemos o la cambiamos, si la cambiamos, cómo lo queremos hacer. Es de verdad, para los que creemos que la democracia, es el mejor sistema de gobernanza que hay, una gran y hermosa oportunidad.
Hoy quiero invitar a todos los vecinos de Cabo de Hornos, a todos los ciudadanos de esta comuna a que concurran con tranquilidad mañana a las urnas. Que los acompañe la convicción, un lápiz pasta azul y su mascarilla.
No podemos dar paso a nada ni nadie nos haga dudar un minuto de que nuestra amistad cívica se pueda romper. Todas las opiniones deben ser respetadas y oídas. Las autoridades deben tener la mesura necesaria para tomar buenas decisiones y que, en nuestra diferencia, todos queremos vivir mejor y en paz.
Soy un convencido que este domingo comienza a emerger un nuevo Chile, más dialogante y respetuoso de lo nuestro. Que definitivamente el medio ambiente será el regalo protegido que le dejaremos a las nuevas generaciones. Que las oportunidades de vida no dependerán de la cuna en la que naciste o el apellido que lleva tu ascendencia.
Vayan a votar, marquen la alternativa que más le represente y convenza, pero por favor vaya. Que otros no decidan por usted, que el destino que se comienza a dibujar, sea también con el aporte de su pincel.
Les pido encarecidamente que tomen todas las medidas de precaución frente al Covid-19, manteniendo la distancia y utilizando la mascarilla en todo momento. Que esta fiesta que nos aprontamos a vivir sea eso, una fiesta que no se puede ver empañada por la intolerancia ni por la pandemia.
Queremos paz, queremos vivir en comunidad donde cabemos todos. Acá nadie sobre y cada uno juega un papel fundamental en nuestra pequeña y esforzada sociedad. A los del rechazo y los del apruebo, que sean todos bienvenidos a dirimir nuestras diferencias como se debe, a través de un lápiz y un papel.
Vecinas y vecinos, ya mañana nos volveremos a reencontrar con la amistad tan característica que tenemos acá, en la reserva mundial de la biósfera, sólo así, Cabo de Hornos crece.