Han pasado 39 días desde que Punta Arenas salió de una prolongada cuarentena que se extendió por casi cuatro meses.

En las primeras horas de desconfinamiento la gente salió a comprar, a disfrutar de la libertad y aprovechar de hacer cosas que en tiempos de cuarentena no se podía. Con el transcurso de los días y la llegada del verano, los magallánicos, en especial los jóvenes, parecían que se encontraban en una nueva normalidad.

Gran cantidad de personas en avenidas Bulnes y Costanera se juntan en grupos para disfrutar de las altas temperaturas que algunos días ofrece la capital regional, lo que está permitido en la fase dos del plan Paso a Paso.

Sin embargo, no siempre se cumple las medidas sanitarias básicas en estos contextos. Generalmente, los adolescentes se juntan en grupos sin respetar la distancia física y menos el uso de mascarilla.

Sumado a esto, las fiestas clandestinas también son una realidad aquí en la zona.

“Sentimos rabia porque el esfuerzo que se hace de parte del equipo de salud se ve sobrepasado por actitudes irresponsables de la población. En este momento la culpa de los contagios no es de las pesqueras, los contagios se producen en los grupos familiares o reuniones sociales” comentó Paulo Carrasco, vicepresidente del Consejo Regional del Colegio Médico al programa “Tiempos de Pandemia”.

Hasta este domingo, 31 personas han fallecido en la Región de Magallanes por culpa del coronavirus el 2021.

Además, los números están muy lejos para que Punta Arenas de un nuevo paso hacia el desconfinamiento. Las cifras están más cercanas a un retorno a la cuarentena.

“No sacamos nada con volver a la fase uno porque la gente no respeta el encierro. Usan permisos falsos y se saltan los protocolos. La situación seguiría siendo la misma” dijo Carrasco.

La proyecciones para la capital regional y la región son una total incertidumbre. Hace unos días, el secretario regional ministerial (S) de Salud, Eduardo Castillo, comentaba que es difícil hacer una proyección porque las cifras un día suben y al otro bajan, pero se mantienen regularmente en números altos.

Vacunas

El proceso de vacunación contra el coronavirus se inició en Magallanes el pasado 25 de diciembre, donde 165 funcionarios de las UPC fueron inoculados con la primera dosis de la vacuna de Pfizer.

Veintiún días después estos mismos trabajadores de la salud recibieron la segunda dosis.

Desde ahí que no han llegado más vacunas a la región, pero, se espera, que pronto llegue este denominado “oro líquido” ahora que se aprobó, durante la semana, la vacuna de Sinovac llamada Coronavac, que entre fines de enero y principios de febrero traerá poco más de dos millones de dosis al país.

Dos vacunas que fueron creadas en tiempo récord, lo que, para algunas personas, genera preocupación.

“Esto nos debería dar esperanza, porque hay un objetivo único mundial enfocado solo en el coronavirus. La comunidad científica solo se preocupó de esto el 2020. Ese esfuerzo lleva a tener buenos resultados que cumplieron con todos los protocolos” comentó la doctora Lorena Tapia, infectóloga infantil de la Clínica Las Condes.

Por otro lado, durante esta semana el ISP analizará la aprobación del uso de emergencia de la vacuna de la Universidad de Oxford/AstraZeneca para ser usada en nuestro país.