El lunes hubo otro nuevo avistamiento de un huemul -hembra en esta ocasión- que transitaba en la ciudad de Punta Arenas, esta vez a un costado de la Escuela Padre Alberto Hurtado. Tras la llamada de vecinos del sector llegó personal de Carabineros y un equipo del SAG a este lugar, quienes procedieron a trasladar al animal a un espacio más seguro. Para poder movilizarlo se le tuvo que disparar un tranquilizante y luego fue llevado al interior del recinto del Complejo Penitenciario de Punta Arenas.

A eso de las 15.00 horas fue llevado a la Reserva Nacional Laguna Parrillar, recinto de patrimonio forestal de Chile que se encuentra bajo la protección de la Conaf. En ese lugar se recuperó de la anestesia, la chequearon e hicieron un tratamiento médico-preventivo para luego liberarla, por lo que se integró de buena forma al medio. Mauricio Ruiz, jefe de Áreas Silvestres Protegidas de la Conaf, estuvo presente en su liberación.

“En un inicio no reaccionaba. Al cabo de una hora se sacó afuera y ahí reaccionó inmediatamente, fue bien especial. Salió un poco aturdida y se fue por entremedio de unos ‘arbolitos’ que están cerca de la laguna”, explicó

Allí estuvieron monitoreándola algunas horas, después volvieron y ya se había ido. “Me comuniqué con la guardaparque del lugar, Irma Triviño, y ella no la había avistado. Lo más probable es que se junte con el macho que liberamos la semana pasada, y esperamos que no tengan mayores riesgos de ataques de pumas”, comentó el especialista.

Esta situación es bastante extraña, ya que nunca se había sabido de huemules que circundaran por la ciudad, sobre todo en días tan cercanos entre sí. Las probabilidades efectivamente son bajas y no hay registros anteriores, a excepeción de fotos antiguas que fueron tomadas cuando Punta Arenas estaba empezando a conformarse.

“En 1910 había fotos de familias que iban a acampar cerca de la zona periférica y se encontraban con huemules. Pero hoy, con las urbanizaciones es supercomplejo”, expresó Ruiz.

No se quedó ahí y se refirió a su hipótesis: “La teoría es que se desplazó por el cordón biológico que llega hasta el aeropuerto de Punta Arenas, porque donde hay bosque hay probabilidad de población de huemul. Creo que ambos bajaron del bosque que está arriba en los cordones biológicos entre las dos reservas tras los temporales de viento, se desorientaron, se separaron, encontraron la ciudad y cada uno partió por su lado”, dijo.

- Entonces es posible de que se trate de una pareja. “Nosotros creemos que sí se trata de una pareja. Lo vamos a saber ahora cuando verifiquemos estos días en los que se junten. Todos los veranos es época reproductiva para ellos y de apariciones en primavera. Muestreos de población de huemules no hacemos en la península, hacemos en Puerto Edén, Bernardo O’Higgins y Torres del Paine por el sector del Gray, que son lugares más habituales en donde están ellos”.