Durante 541 noches un conductor que fue condenado por manejar ebrio y sin licencia tendrá prohibido abandonar su domicilio. También tendrá que pagar casi 300 mil pesos de multa y no podrá obtener un documento de conducción durante cinco años.

El condenado fue detenido el 17 de octubre de 2020. Era cerca de la medianoche y la región estaba en toque de queda por la crisis sanitaria. Funcionarios del Ejército fiscalizaban el cumplimiento del estado de excepción en el sector Cumbres Patagónicas y detuvieron a un vehículo marca Toyota.

A bordo estaba el imputado, que presentaba signos de estar ebrio y no contaba con su salvoconducto o permiso temporal. Los militares se comunicaron con Carabineros, quienes le practicaron el examen respiratorio y arrojó 1,74 gramos de alcohol por litro de sangre. Tampoco tenía su licencia de conducir, por lo que fue detenido.

Tras ser formalizado al día siguiente de su arresto, el imputado quedó con arraigo regional y arresto domiciliario nocturno. Cumplió con ambas medidas cautelares hasta ayer, cuando fue enjuiciado en un procedimiento abreviado.

Por el delito de manejo en estado de ebriedad sin licencia el tribunal lo condenó a 541 días de reclusión parcial nocturna y el Centro de Reinserción Social de Gendarmería debe monitorearlo a través de una tobillera electrónica. Además tiene que pagar una multa de casi 150 mil pesos y no podrá obtener licencia de conducir por el lapso de cinco años.

El tribunal también lo condenó al pago de 1 UTM –cerca de 50 mil pesos– por infringir normas sanitarias.

El conductor no pudo acceder a la libertad vigilada intensiva por sus antecedentes penales. Registra dos condenas por manejo en estado de ebriedad; en una de ellas lo sorprendieron con la placa patente de su vehículo adulterada.