Quienes lo conocen, dicen que Christian Matheson Villán es un hombre trabajólico, metódico y planificado. Y ahora su desafío está puesto en la Cámara Baja, ya ninguno de los tres diputados actuales va a la reelección y es así que está la posibilidad de renovar a nuestros representantes en el Congreso.

Christian Matheson Villán, de 63 años, es hijo de Guillermo, exejecutivo bancario y de Josefina, profesora y pequeña empresaria.

Nació en Punta Arenas el 17 de diciembre de 1957, realizando sus estudios básicos en el British School y los medios, en el Liceo Salesiano San José, titulándose como arquitecto en la Pontificia Universidad Católica de Chile.

El origen del apellido Matheson, dicen los eruditos, comienza a multiplicarse primero en Escocia, aunque otros, lo confirman en el País de Gales y también en Irlanda, como sea, la estirpe de la genealogía proviene del reino de Gran Bretaña y se encuentra diseminada también por Argelia, Egipto y Sudáfrica.

En su época de estudiante, en el Liceo San José, tuvo un breve paso por el afamado grupo musical magallánico, Patagonia 4.

Como buen agradecido hijo de esta región austral, al concluir sus estudios universitarios regresó a Punta Arenas e ingresó a trabajar como arquitecto en la Dirección General de Deportes y Recreación (Digeder), antecesora del Instituto Nacional del Deporte (IND). En su paso por el servicio público, entre 1987 a 2002, le cupo impulsar las construcciones del albergue deportivo, ubicado a un costado del Estadio Fiscal Antonio Ríspoli y el gimnasio del Barrio 18 de Septiembre, entre otras obras.

También Matheson, siguiendo la huella de su padre Guillermo, que fue cónsul británico en Punta Arenas y decano del Cuerpo Consular, fue cónsul honorario de Holanda en la ciudad.

Durante la semana, el arquitecto participó en el programa radial “Las Cosas por su Nombre”, de Pingüino Multimedia. Allí se refirió a diversas temáticas, las cuales podrá leerles en las próximas dos páginas.

- ¿En que hemos avanzado en nuestro país en los últimos dos años?

“Las personas que salieron a protestar ese 18 de octubre demandando que se les solucionen problemas que realmente tiene la población y son problemas con salud, con la vivienda, con la educación, con las pensiones baja, con el sueldo mínimo que no alcanza para sobrevivir fueron engañadas por los políticos de siempre. Ellos dijeron que lo que se necesitaba era una nueva Constitución, siendo que en la Constitución estaban consagrados muchas demandas que permitían superar las demandas que tenía la población. Entonces, resulta que los últimos dos años no hemos avanzado nada, porque los políticos de siempre volvieron a engañar a la gente y no se han dedicado hacer políticas públicas claras, que solucionen realmente los problemas de todo Chile. Y estamos en lo mismo, veía un afiche que circulaba del Partido Comunista que llamaba a manifestarse de una manera bastante violenta, porque no habíamos avanzado nada a pesar del estallido social y la realidad es esa que la población fue engañada con una nueva Constitución”.

- ¿Las leyes de qué forma se pueden mejorar?

“Con políticas públicas que realmente ataquen a la demandas de la ciudadanía o los requerimientos, en los últimos 30 años las demandas de la ciudadanía han cambiado mucho y realmente los políticos se han enfrascado en discusiones que no conducen a nada y además resguardando sus privilegios, por ejemplo dijeron vamos a limitar las reelecciones de los parlamentarios y la verdad es que un parlamentario igual puede pasar 28 años en el congreso y eso es impresentable, pero permanecer 28 años es encriptarse en el parlamento y en definitiva tener una vida bastante cómoda”.

- Lo que pasa es que pasan a vivir de la política y la toman como una profesión…

“Por supuesto, pasa hacer una forma de vida y un político en esas condiciones realmente no sabe vivir de otra forma y demanda ser reelecto. La persona ya deja de cumplir su función y es necesaria una renovación de la política, es necesaria una renovación del Parlamento y que realmente llegue gente que quiera trabajar por el país, que quiera trabajar por su región, que pueda solucionar los problemas”.