Ayer el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas condenó a dos jóvenes que dejaron gravemente herido a un hombre tras ser agredido con bates de béisbol. Ambos estaban acusados por homicidio frustrado, pero los jueces recalificaron el delito por lesiones graves.
El delito ocurrió el 31 de enero de 2020. En horas de la madrugada el condenado Mario Oyarzún Díaz salió del local nocturno Broadway tras un altercado con la víctima. Se dirigió hacia un Mazda donde se encontraba el segundo acusado, Gonzalo Arancibia Robinson.
Ambos se premunieron de bates de béisbol e interceptaron al afectado en la esquina de Avenida Bulnes con calle Ovejero. Lo agredieron en la cabeza y en otras partes del cuerpo. Durante la golpiza lo botaron al piso y le pegaron con los objetos contundentes y patadas.
La víctima resultó con un TEC, fractura de tres piezas dentales y heridas cortopunzantes en el cuero cabelludo. “(Son) lesiones de carácter grave con un tiempo estimado en sanar a 30 días”, dice la acusación de la Fiscalía.
En el juicio comparecieron testigos de la pelea y funcionarios policiales que participaron de la investigación. También se exhibieron las cámaras de vigilancia del pub y la ficha clínica de la víctima, entre otros medios de prueba.
Los acusados arriesgaban hasta ocho años de cárcel por su presunta autoría de un homicidio frustrado. Sin embargo, tras rendirse la prueba los jueces dieron por configurado un delito de lesiones graves.
“Resultó establecida, más allá de toda duda razonable, únicamente la existencia del referido delito, así como la participación culpable que en este cupo a los acusados en calidad de autores”, dice el veredicto.
Además, los jueces reconocieron la agravante de haber perpetrado el delito empleando objetos contundentes y la atenuante de colaboración sustancial al esclarecimiento de los hechos.
La sentencia se conocerá el próximo 9 de julio. Ambas defensas solicitan que se impongan sanciones que puedan ser cumplidas en el medio libre y que se abone el tiempo que llevan bajo arresto domiciliario. La Fiscalía, por otro lado, pide penas efectivas.