Una vez que se calificó al Covid-19 como una pandemia, gran parte de la población entró en una dinámica nueva y compleja. Lo que se inició como una crisis sanitaria, en un par de meses se transformó en una crisis económica.
A día de hoy, el bolsillo de los magallánicos ha sufrido las consecuencias de aquello, sumado a otras situaciones que han acontecido en el país, que han provocado una mayor incertidumbre económica.
Bajo ese escenario, los días cada vez se hacen más complejos y las personas nos cuentan sus impresiones frente a esta dura realidad.
Los sueldos ya
no alcanzan
“Hemos visto un alza incrementada en el último año y medio”, describe Claudio Larrea, quién además comenta que el alza de los precios se vio primeramente en los materiales de la construcción, y ahora ya está radicado en la alimentación.
“Uno como persona, padre de familia, empieza a notar que el sueldo que tenías antes no alcanza a cubrir las mismas necesidades”, dice Claudio.
El entrevistado agrega que acá en Magallanes se sufre más en temas como el alza del precio de los combustibles.
Poca fiscalización
Por su parte, José Cárdenas criticó la poca fiscalización ante el alza del costo de la vida.
“Eso pasa porque no hay regulación de precios, si hubiera fiscalización no habría tanta diferencia de precios”.
Cárdenas explica que existe una distancia entre supermercados o tiendas del mall y la Zona Franca. “Se supone que ahí no debiese haber tanta diferencia, deberían estar más bajos los precios en Zona Franca”.
Préstamos
En tanto, Miriam ha debido recurrir a los préstamos. “La verdad para que uno salga adelante, uno tiene que pedir préstamos, tratar de ver la situación por otros medios”, nos dice.
Ella lamenta que el alza de precios también se haya traspasado al ámbito de la salud, complicando más aún las cosas, en especial, de aquellas personas que dependen de tratamientos.