Los buses del transporte público de Punta Arenas terminarán su recorrido a las 19:00 horas este martes y miércoles. El motivo es el cambio del administrador de la operación: pasará de Ascendal a Vía Alerce, empresa que se adjudicó la licitación vía trato directo por trece meses (prorrogables a otros tres más). De acuerdo a información de Gobierno, son 70 máquinas las que están a disposición de la ciudadanía, pero fuentes de El Pingüino transparentaron que la cifra no es tal.

El secretario regional ministerial (Seremi) de Transportes, Rodrigo Hernández, dijo de las máquinas con daño: “Es una logística compleja, con varios factores. El estado técnico de las máquinas es gravitante en todo esto. Lo importante es que son máquinas y se pueden reparar. Para ello requieren de un interés y un conocimiento específico, por dar un buen servicio y por reparar las máquinas. Como ministerio, estamos trabajando para que eso sea patente en la ciudad y que no sigamos viendo este proceso de decaimiento de nuestra flota prematura, que estimamos que ha estado ocurriendo- Tienen cuatro años las máquinas y están en un estado de decrepitud bastante mayor”.

Trastienda

Vía Alerce aterrizó hace más o menos dos semanas en Punta Arenas, luego de un llamado a licitación vía trato directo en el que respondieron dos empresas. 

Cuando los trabajadores llegaron, se percataron que de las 70 máquinas de las que el Gobierno disponía nominalmente había solo 45 “vivas”. Y, de ellas, 20 a 25 plenamente operativas. La diferencia fue la siguiente: Ascendal, al notificar a Vía Alerce del estado de los buses, no dio cuenta que la mitad de los que estaban “vivos” tenía un nivel de fragilidad tal que podían sufrir un daño durante el recorrido (fuentes ejemplifican con “la caída de un motor, o un neumático que se sale”), poniendo en riesgo la integridad física de los pasajeros, los conductores y otros transportistas de la ciudad. 

Lo anterior ocurrió por falta de mantenimiento, aunque el problema es más profundo.

En la edición de domingo de El Pingüino, el seremi Hernández contó que hubo una suerte de “vicio” contractual, pues el operador de las máquinas y el encargado de mantenimiento de estas era la misma empresa: Ascendal. Ello podría haber dado paso a este daño a los buses. 

Con todo, fuentes ligadas a Vía Alerce advirtieron que “desde el próximo miércoles va a haber problemas en la transición de transporte público”. 

Conductores

Los transportistas a cargo de conducir las micros están al tanto del estado de las máquinas. Es decir, les fue informado que el problema de la baja, bajísima frecuencia no será tanto por falta de recurso humano, sino por la falta de mantenimiento, a consecuencia del vicio de los contratos que pusieron en un mismo lugar a los operadores y a los encargados de fiscalizar el estado de las máquinas. 

Las fuentes del traspaso lo ejemplificaron así: “Si uno tiene empresa de transporte, tiene que haber también mantenciones de aceite, lubricante, y acá prácticamente no hubo. Las máquinas fueron relativamente nuevas, pero más de la mitad están más o menos ‘muertas’, las hechas a andar y pueden quedar en pane a la vuelta”.

Con todo, este martes se hará un traspaso “formal” de las actas de revisión de buses. Ahora, solo queda esperar.