Un operativo conjunto de la Policía de Investigaciones (PDI) permitió desarticular una red criminal vinculada al narcotráfico al interior del penal de Alto Hospicio, en la Región de Tarapacá.
La acción culminó con personas detenidas, entre ellas funcionarios de Gendarmería (incluido un oficial) y civiles, por su presunta colaboración externa.
La investigación reveló que los gendarmes facilitaban el ingreso de drogas, armas, municiones y dinero en efectivo al recinto penitenciario. La fiscal regional de Tarapacá, Trinidad Steinert, explicó que se trataba de una organización orientada al lucro sistemático, que operaba desde al menos 2023 con vínculos familiares y triangulación de dinero para la adquisición de vehículos e inmuebles, un posible delito de lavado de activos.
El despliegue involucró a más de funcionarios de la PDI, con allanamientos simultáneos en Iquique, La Araucanía y el Biobío (Temuco y Concepción).
Se incautaron armas de fuego, municiones, vehículos y dinero en efectivo (más de mil euros), entre otros elementos. De acuerdo con fuentes de la investigación, las primeras pistas surgieron a partir de la intervención telefónica de un funcionario involucrado en tráfico interno.
El ministro de Justicia, Jaime Gajardo, recalcó la gravedad del caso y afirmó que “la limpieza de Gendarmería es clave para un sistema penitenciario sólido”. Por su parte, el director nacional de Gendarmería, Rubén Pérez Riquelme, anunció auditorías patrimoniales internas y reforzamiento de los controles.
Los imputados serán formalizados en los próximos días por delitos asociados a tráfico de drogas, asociación ilícita y lavado de activos. La fiscalía no descarta nuevas detenciones.