En la actividad hubo espacio para autoridades regionales, comunales y miembros de la comunidad. Entre estos últimos, hubo detractores de la iniciativa y personas que la apoyaban, entre ellas Fernanda Almonacid Quintullanca y su hija Amara. Sin embargo, en los últimos días ambas han recibido repudio de parte de otros puntarenenses por respaldar la iniciativa.
En defensa de ellas, El Movilh alzó la voz y expresó su solidaridad con ambas. “Lamentamos profundamente que el compromiso de una joven madre por promover el respeto a la diversidad social y familiar, termine en insultos hacia su persona y hacia su pequeña hija, de apenas seis meses. Este tipo de situaciones no pueden ocurrir en ningún lugar de nuestro país”, manifestaron.