Tras estar prófugo de la justicia por siete años, un asaltante condenado a principio de mayo de este año debió ingresar a cumplir la sentencia de diez años de cárcel. Sin embargo, su defensa solicitó que se rebaje dicha pena, lo que fue aceptado por el tribunal.
La semana pasada se realizó una audiencia en el Tribunal Oral en lo Penal, donde el abogado defensor Juan José Arcos solicitó la media prescripción en favor de su cliente, argumentando ante los jueces que al haber transcurrido más de cinco años entre la fecha del quebrántamiento y la fecha que fue detenido. Agregó que mientras estuvo prófugo no cometió delitos y tampoco nunca salió del país, ante esto pidió que la pena se rebaje a la mitad.
Fue así que el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas emitió su decisión acogiendo lo solicitado por la defensa, modificando así la pena impuesta de diez años y un día dictada el 19 de octubre de 2007, disminuyéndola a cinco años de cárcel.
Carlos Iván Caro Gerdes fue detenido el 8 de mayo pasado por personal de la SIP de Carabineros, luego de mantenerse prófugo de la justicia desde el año 2009. El día de la detención, se le indicó que había quebrantado una condena el 16 de octubre del año 2009, cuando no regresó al Centro Penitenciario de Punta Arenas, luego de encontrarse con un beneficio intrapenitenciario dentro de su condena por un delito de robo con violencia.
Caro Gerdes fue condenado en octubre del año 2007 en el Tribunal Oral en lo Penal de Punta Arenas luego que en el mes de abril de ese mismo año, alrededor de las 5.50 horas de la madrugada, cuando en compañía de otro sujeto interceptó a un transeunte en calle Arturo Prat a la altura de calle Paraguaya, agrediéndolo con golpes de pies y puño en diferentes partes de su cuerpo, para luego registrarle sus vestimentas, apropiándose de diversas especies, entre ellas una billetera, un teléfono celular y un llavero, siendo detenidos por Carabineros cuando huían del lugar al percatarse de la presencia policial. Al efectuarse el respectivo registro de vestimentas al imputado, a Bórquez Campos se le encontraron las especies.
Producto de estos hechos, la víctima resultó con contusión de cráneo, contusión ocular derecha, heridas cortantes frontal, ciliar derecha y retroauricular izquierda.
Tras este juicio los acusados fueron condenados, y Caro Gerdes sufrió la pena de diez años y un día, de la cual alcanzó a cumplir solamente dos antes de no retornar a la cárcel de Punta Arenas.