Una vez finalizados los peritajes realizados por peritos del Cuerpo de Bomberos de Punta Arenas, se confirmó que la causa del siniestro que destruyó el Templo Evangélico Bautista fue un calentador que había sido encendido en el recinto.
La información fue confirmada por el segundo comandante de Bomberos, Eduardo Bahamonde, quien señaló que “de acuerdo a lo que mencionó el perito el origen sería un calentador. Unos momentos antes de iniciado el fuego, de acuerdo a lo que comenta una persona, se habían encendido los calentadores y el perito, determinando el área focal, dijo que al parecer era ésta la causa”.
El Templo Evangélico Bautista de Playa Norte llevaba funcionando varios años y había sido levantando gracias al trabajo y unión de sus miembros. Es por lo anterior, que la comunidad afectada no ha podido realizar un avalúo de las pérdidas, señaló José Cristián Mercegué, encargado de la congregación.
“No hicimos avalúo porque lo que pasa es que la construcción que se incendió funciona a base de donativos de la gente, donde no hay una inversión que se pueda contabilizar, quizás los muebles, pero un avalúo de los daños es difícil que se pueda realizar, no lo podríamos dar. Tampoco hay seguros comprometidos, porque todo había sido donado a través de los años de existencia de la congregación y nunca se pensó en tasarlo ni darle un valor”, agregó.
Mercegué destacó que “siempre hay apoyo de las comunidades cristianas, y la idea es poder habilitar el sector que quedó con menos daños, el sector de construcción de material sólido, poder habilitarlo para que se realicen las funciones que cumple a la comunidad que se congrega en el sector, pero obviamente hay un comunicado para recibir apoyo, que se acerca a la Unidad Bautista de Chile, quienes son dueños de todo, el terreno y todo lo que hay ahí. Las comunidades funcionan siempre en apoyo de la más débil, así que hemos recibido ayuda de las otras comunidades, siempre ha sido así”.
Con paciencia, pero sobre todo con mucha fe, el encargado de la congreaicón dice que dentro de las próximas semanas el templo debería estar funcionando de manera normal.