La Mina Invierno en conjunto con el Club Andino invitaron a cerca de 60 niños del grupo scout del Liceo San José, quienes ayer plantaron más de 500 árboles de lenga, en las dependencias del Andino.
El jefe de rehabilitación ambiental de Mina Invierno, Gabriel Rodríguez comentó que “esta actividad la enmarcamos dentro del programa anual que tenemos de Forjadores Ambientales y consiste, en este caso plantar 500 plantas de lenga en un sector del Club Andino, que es una compensación por la corta de algunos árboles de la ampliación de algunas pistas que tiene programada el club para el próximo año”. Agregó que “esto es una cosa que nosotros tenemos que incentivar, de hecho en Magallanes, particularmente la ciudad de Punta Arenas, se ve muy poco verde, muy poco árbol y teniendo un pulmón como este en la reserva Magallanes. Creemos que es una actividad relevante e importante acercar a la gente a lo que es el bosque, acercar a la gente a las especies nativas de nuestra región y con eso colaborar un poco con la gente de los grupos scout y que los niños tomen consciencia de lo que es el crecimiento de los árboles y la importancia de las mismas para la vida”.
El presidente del Club Andino, Eugenio Prieto, expresó que “como club hemos estado constantemente comprometidos con nuestro cerro. Hay que pensar que estamos en un entorno que es muy particular. La reserva Magallanes que tiene miles de hectáreas, nosotros somos un pequeña fracción de la reserva.
Añadió que “todos los años realizamos actividades relacionadas con el medio ambiente, vinculadas a la limpieza, el orden, a los cierres perimetrales, etc. En esta ocasión, gracias al apoyo de Mina Invierno, estamos pudiendo realizar una actividad de reforestación que tiene relación con otras actividades de limpieza que hemos ejecutado en otras partes del cerro para habilitar temas deportivos. Hacemos actividades autorizadas por Conaf de despeje de ciertas áreas para habilitar nuevas pistas y por eso esta es una actividad de compensación”.
Por su parte, el sacerdote  José Chaf, a cargo de los scout del Liceo San José, señaló que “el hecho de ya salir de la casa, salir del lugar a ellos les ayuda a valorar el entorno precioso que tenemos nosotros en Magallanes y esta actividad es una instancia formativa, recreativa pero que en el fondo nos invita a cuidar lo que tenemos”.