En la Catedral de Punta Arenas se celebró ayer una eucaristía por el día de la Asunción de la Virgen, oportunidad en que el obispo de Magallanes, Bernardo Bastres Florence, agradeció el trabajo que realizan las religiosas en la región más austral de Chile.
La fiesta de la Asunción de la Santísima Virgen María la celebra toda la Iglesia el 15 de agosto y para los católicos tiene dos significados: la feliz partida de María de esta vida y la asunción de su cuerpo al cielo.
La celebración contó con la participación de más de 200 feligreses, quienes dieron gracias a Dios y celebraron de igual forma a las religiosas, por ser, además, su día.
En Magallanes, actualmente existen tres grupos de religiosas: las Hijas de María Auxiliadora, quienes este año cumplen 130 años de presencia en la región, las Hijas de la Caridad y la Comunidad Santa Clara.
Durante la celebración, el pastor de la Iglesia de Magallanes dijo que “hoy celebramos la Asunción de María, el dogma que de alguna manera nos dice qué va a pasar con todos los cristianos, ese concilio en que María fue la primera creyente que experimentó lo que significa la resurrección definitiva. Por lo tanto, la fiesta de hoy día, que se llama la fiesta del Tránsito, nos recuerda hacia dónde vamos, nos recuerda que todos nosotros estamos llamados por el Señor a la resurrección”.
Bastres agregó que “por otro lado, en varias diócesis celebramos la fiesta de las religiosas, las mujeres que se han consagrado al Señor. Para nosotros son de vital importancia las religiosas en la historia de Magallanes, son esenciales a la promoción de la mujer, por ejemplo, las Hijas de María Auxiliadora cumplen 130 años de presencia en Punta Arenas y el primer colegio que abrieron las hermanas, fue el primer establecimiento en el que entraron las mujeres de Punta Arenas a estudiar, luego les dieron profesión y no sólo eso, en el colegio las hermanas mezclaron niñas indígenas con niñas que estaban en la ciudad y por lo tanto, en esa época ya existió una integración muy importante y después creo yo que el testimonio que dan las religiosas de Dios es sumamente importante”.
Asimismo, la máxima autoridad de la Iglesia Católica de Magallanes aprovechó la oportunidad para destacar la labor que realizaron las hermanas de la Caridad durante años en el Hogar del Niño Miraflores, manifestando que “ yo creo que hoy más que nunca extrañamos el servicio que entregaban las hermanas de la Caridad en el Hogar del Niño, cuánto dijimos el año pasado y fuimos a golpear tantas puertas, incluso las de algunos que hoy día están tan preocupados de lo que pasa en el Sename y nadie hizo caso y las hermanas cerraron un lugar donde estaban los más vulnerables y donde daban un hermoso testimonio”.
Al finalizar la eucaristía, los feligreses agradecieron la labor de las religiosas y se les acercaron a felicitarlas y a entregarles diversos estímulos como símbolo del cariño hacia ellas.