Luego del feroz ataque físico que sufrió el animador natalino Patricio Díaz, de parte de una mujer que anteriormente lo había agredido verbalmente por su orientación sexual, el repudio generalizado no se hizo esperar.

Desde Santiago, el Movilh “condenó este deleznable hecho de violencia” y expresó “toda nuestra solidaridad a Patricio, quien está muy afectado por lo sucedido”.

Asimismo, la agrupación derivó los antecedentes del caso al Ministerio del Interior para que brinden la orientación legal y sicológica necesaria a la víctima.

Nuevos ataques

La mañana de ayer, contactado por Diario El Pingüino, el director del Área Derechos Humanos del Movilh, Rolando Jiménez, ratificó lo expresado por la organización y profundizó en los orígenes de la violencia homofóbica.

“Lamentamos este tipo de agresiones y hemos puesto los antecedentes en manos del programa de apoyo a víctimas de delitos violentos, con quienes tenemos un convenio de cooperación. Ahí hay abogado, sicólogo, asistente social, para ayudar a las víctimas de estas situaciones”, explicó.

Tras enterarse de las declaraciones de la propia víctima, Jiménez declaró que “la causa de la agresión sería la homofobia, pero será la investigación policial y de la Fiscalía la que determinará lo que ocurrió exactamente. Patricio Díaz relató públicamente que habría habido antes ataques de carácter verbal de parte de la agresora, que tengo entendido fue detenida en las últimas 24 horas y puesta a disposición de los tribunales en la mañana (ayer)”.

- ¿Ha recrudecido este tipo de ataques, pese a la existencia de la Ley Zamudio?

“Yo diría que no hay un aumento de casos de agresiones, lo que hay es una mayor tasa de denuncias, la gente se atreve más a denunciar las situaciones de violencia por orientación sexual. Lo que sí ha crecido es la violencia verbal y discursiva de grupos ante el avance de los derechos de la población de diversidad sexual. Con la aprobación de las leyes antidiscriminatorias y de unión civil, más el ingreso de la ley de matrimonio igualitario, lo único que les va quedando a los conservadores es la violencia. Incluso a mí, en los últimos meses, cuando vino el famoso ‘bus de la libertad’, que nosotros llamamos el ‘bus de la discriminación’, un grupo de evangélicos muy alterados intentó agredirme frente al Palacio de la Moneda”.

- ¿Esto podría ser el inicio de una escalada de violencia?

“Lamentablemente, vamos a ver hechos de violencia muy agudos, probablemente masivos, en las próximas semanas o meses, en la medida que se desarrolle la tramitación de la ley. Eso es por la desesperación ante el fracaso evidente; intentaron bloquear la ley que despenalizaba la sodomía, la de unión civil, la antidiscriminatoria, y han perdido todas esas batallas, porque el mundo va en otra dirección, la del respeto, la inclusión y de garantizar la dignidad para todos”.