En la actualidad mucho se habla, pero tal vez, poco se sabe y se conoce sobre el trabajo del Programa de Integración Escolar (PIE) al interior de los establecimientos educativos. Es por este motivo que su protagonista, Helga Fernández, coordinadora del PIE en el Liceo Polivalente Sara Braun de Punta Arenas, nos cuenta de la labor desarrollada durante las primeras semanas de este año escolar.

Este establecimiento cuenta con un equipo multidisciplinario conformado por dos educadoras diferenciales, tres psicopedagogas, un terapeuta ocupacional, un psicólogo y una fonoaudiologa.

“La idea es trabajar con los estudiantes para romper las barreras que trae un estudiante que tenga una necesidad educativa especial, de carácter permanente y transitoria”, expresó Fernández sobre el objetivo del PIE.

Previo al inicio del trabajo con el alumno, se desarrolla una evaluación multiprofesional y luego se aplican programas especiales, tales como el Plan de Apoyo Individual (PAI) y el Plan de de Adecuación Curricular Individual (PACI) que son ejecutados por las educadoras especiales. Cuenta con análisis en el área social, el área emocional, el área física, el área intelectual y además de los contenidos que puede manejar el estudiante.

“La idea nuestra es que un joven se desarrolle y salga de cuarto medio como un individuo independiente, habiendo elegido lo mejor para su vida, pero de sí mismo, y que sea un aporte a la sociedad desde el ámbito que sea”, agregó.

A diario, cada profesional visita las aulas para apoyar el profesor en su asignatura, principalmente en Lenguaje y Matemáticas, así como también en otras donde se evidencien falencias de aprendizaje. A su vez, el terapeuta ocupacional apoya en las clases de Educación Física.

Por otra parte, se disponen dos horas denominadas “aula de recursos”, que se desarrollan en la sala especial y adecuada para el PIE, en donde las psicopedagogas desarrollan habilidades de carácter cognitivo para que los estudiantes puedan desarrollar el aprendizaje de mejor manera, fortaleciendo alguna de las áreas: social, emocional, física e intelectual.

Durante los primeros de marzo, a los alumnos se les aplicó una evaluación pedagógica para identificar cuál es su base de conocimientos, con el objetivo de proceder a la nivelación de contenidos.

“Las psicopedagogas también hacen un informe a cada uno de los estudiantes que llegó a PIE. Los evalúa con el test de “Evalúa” luego hacen un informe de carácter psicopedagógico abarcando el área cognitiva y también algunas áreas sociales en el desarrollo del estudiantes”, agregó la encargada del programa del liceo.

Convivencia escolar: la parte complementaria

Para lograr objetivos de la comunidad estudiantil, donde se imponga el respeto entre los estudiantes, apoyo y contención entre ellos, se ha desarrollado un trabajo mancomunado entre PIE y el área de convivencia escolar.

Al respecto, la encargada del área, Rosa Santana, comentó que esto ha sido ejecutado debido a que el plan de convivencia escolar del establecimiento tiene como objetivo central “que todos sean incluidos e integrados en la comunidad en dos términos fundamentales: el buen trato y una sana convivencia”.

Para evitar que los estudiantes pasen tiempos solos, los profesionales de esta área desarrollan un proceso de acompañamiento en las horas de alimentación, en los recreos y también se han implementado talleres para mejorar el autoestima y el respeto en los adolescentes.

El área de convivencia escolar trabaja con entidades y proyectos externos, como el Programa “Habilidades para la Vida” de Junaeb, “Arte90” que fomenta el arte y la cultura, además de la Oficina de la Mujer del municipio de Punta Arenas que fomenta los derechos femeninos, entre otros.