El gran número de casos de Coronavirus a nivel nacional, ha saturado la gran mayoría de la red asistencial de salud, no solo por la cantidad de hospitalizados -que cada día va en aumento- sino también por todo el personal de salud que van cayendo a causa del virus.
De acuerdo al último reporte del Ministerio de Salud, más de 700 profesionales de esta área se encuentran en cuarentena por ser positivos de Covid-19, por ser contacto estrecho de una persona contagiada o cuarentena preventiva.
En Magallanes, la Confederación Nacional de Profesionales Universitarios de los Servicios de Salud (Fenpruss) lleva un registro de todos los funcionarios de la región que están fuera de sus funciones a causa del Covid-19 (Hospitales, Servicio de Salud, entre otras). Sin contar a los funcionarios de Atención Primaria.
El coordinador de Fenpruss del Servicio de Salud Magallanes (SSM), Damián Hurtado, señaló a Diario El Pingüino, que hasta el martes habían 82 funcionarios de toda Red Asistencial diagnosticados de Covid-19 y otros 79 que están en cuarentena preventiva (ver infografía).
El dirigente del gremio agregó que en el último reporte entregado por el Hospital Clínico de Magallanes, once trabajadores de la bodega que guarda insumos del establecimiento clínico, debieron irse a sus hogares ya que uno de ellos fue diagnosticado de Coronavirus.
“La gravedad que nos puede ocurrir, es que varios funcionarios puedan salir contagiados y no tenemos recurso humano suficiente para reemplazar a todos cuando más de uno cae enfermo, ese es el problema”.
Preocupación por dotación
La presidenta regional de la Federación Nacional de Trabajadores de la Salud (Fenats), Alicia Poblete, manifestó que se deben tomar más acciones por parte del Servicio de Salud, en la forma en que se distribuye el equipamiento de protección para los funcionarios.
“Sabemos que hay más funcionarios que se van a continuar contagiando y todavía no se sabe cuántos de los que se han ido de alta, van a regresar en algún momento por rebrote del virus”, dijo.
Poblete añadió que a pesar de tener trazabilidad dentro de la organización hay contacto estrecho entre los funcionarios cuando se movilizan hacia sus hogares, pasillos, ascensores y escaleras.
“A nosotros los que nos preocupa es que se está insistiendo en retomar las funciones, pero si vuelven, todos se van a contagiar al mismo tiempo. Es preocupante que después no tengamos la dotación necesaria para realizar el proceso asistencial. Creo que la salud debe ser reforzada teniendo un equipo de resguardo para que cuando alguno caiga, el otro vaya a suplirlo”, concluyó Poblete.