Más de 13 meses lleva desaparecido el guía turístico Kurt Martinson, la única esperanza que mantiene su familia en estos instantes es el trabajo que realiza un grupo de rescatistas, entre ellos José Luis Orellana, quien viajó desde Punta Arenas junto a Adi, su pastor holandés detector de personas.

Orellana, en conversación con Diario El Pingüino, señaló que viajó a Calama en primera instancia el 5 de enero pasado, para luego dirigirse hasta San Pedro de Atacama, donde ayer terminaron las labores de reconocimiento del sector y hoy comenzarán a realizar la búsqueda.

El guía recordó que lleva dos años operando en Punta Arenas en labores de búsqueda de personas desaparecidas, apoyando incluso a las policías. “En los casos de la región seguimos buscando personas perdidas en Punta Arenas, con recursos propios, como una forma de ayudar a la comunidad. Somos miembros activos del rescate internacional Topos Chile, y nuestra primera misión fue en Tongoy, hasta donde viajamos desde Punta Arenas luego que el tsunami arrasara ese lugar”.

Orellana se mostró contento de poder ser considerandos en estas labores. “Esto es el reflejo de nuestro trabajo en silencio que hemos hecho aquí en la región, preparando nuestros perros de búsqueda que es un lujo tenerlos. Estos cachorros se criaron en la región para búsqueda de personas vivas y recuperación de cuerpos. Esperamos poder tener más apoyo de las autoridades de la región ya que somos los únicos con cuatro perros de rescate para el servicio de la comunidad”.

Recordó que el último trabajo que realizaron se trató de la búsqueda de un funcionario de la PDI en rinconada de Maipú, y en la región en el Parque Nacional Torres del Paine en la desaparición del argenito Leandro Santos, quien fue hallado muerto. Además del padre de familia desaparecido hace un año José Márquez. En Punta Arenas también es miembro de Topos Chile María Paz Díaz, quien también es guía de perros de rescate”.

José Luis Orellana comentó que se mantendrán en la zona para colaborar con la búsqueda del joven desaparecido. “Nuestra jornada comienza a las 5.30 de la madrugada hasta que el sol comienza a subir, de ahí esperamos que la temperatura baje y ahí retomamos las labores de búsqueda”.