Extender sus activos a Punta Arenas parece estar en los planes de la familia Mosa Shmes, controladora del grupo Pasmar, la misma que tiene a su cargo la propiedad y administración de varios mall en la zona sur del país.
Desde sus inicios en la ciudad de Frutillar, Región de Los Lagos, esta sociedad ha apuntado sus esfuerzos a desarrollar proyectos de mediana y gran envergadura. A fines de los ‘70 fue un supermercado en Puerto Montt, luego una distribuidora y a poco de andar una cadena de venta de abarrotes.
Ya en los ‘90 y 2000 su giro se amplió al sector inmobiliario, turístico y hotelero, quedando al frente de los negocios Jack Mosa, creándose en Grupo Pasmar y sentando las bases para lo que sería el Mall Paseo del Mar (1996).
Hoy, la sociedad, donde además de Jack destaca su hermano Aníbal (presidente de la concesionaria Blanco y Negro), es líder entre los operadores de centros comerciales del sur del país. Su inversión registra activos en los paseos Chiloé (mall de Castro), Costanera, Paloma, del Mar, Puerto Varas, Rotonda y el Power Center Cardonal, además administran el Gran Hotel Vicente Costanera, Holiday Inn Express y La Península, en Puerto Montt, entre otros.
Se estima que Pasmar ha invertido más de US$100 millones en los últimos 5 años en el sur del país, y que a lo menos tienen un 5% de participación en el mercado nacional.
Fuentes cercanas a Pasmar han señalado la intención que el grupo tiene de desarrollar nuevas inversiones en Puerto Montt, pero también consideran proyectos en Valdivia y Ancud, y no descartan a corto o mediano plazo extender sus negocios a Punta Arenas.
De hecho, el grupo fue una de las compañías que ofertaron por los diez “Espacio Urbano” que la estadounidense Walmart tiene a la venta y que considera centros comerciales desde Antofagasta a Punta Arenas. Sin embargo, quedaron fuera del proceso, donde se manejan valores cercanos a los 700 millones de dólares.