El fin de semana, más de 30 familias de Punta Arenas decidieron tomarse un terreno ubicado en el sector norponiente de la ciudad, al final de calle Enrique Abello, debido a numerosas molestias por sentirse estafados por malas prácticas de algunos intermediarios, por el alto costo de los arriendos en Punta Arenas y por las políticas públicas existentes para poder obtener una vivienda a través del Serviu.
Las altas autoridades regionales expresaron  que dichos terrenos no eran fiscales, y por lo cual son los propios privados quienes debían ver qué acciones tomar al respecto. Sin embargo, en pocos días se sumaron más de 100 familias a la movilización y los voceros decidieron ayer concurrir a la Intendencia de Magallanes para expresar el malestar al propio Jorge Flies.
La máxima autoridad regional junto al seremi de Vivienda, Fernando Haro, recibió a los manifestantes. La cita duró más de una hora y los dirigentes le manifestaron a las autoridades que en Punta Arenas es muy difícil acceder a una vivienda, tanto en arriendo como para adquirirla. Añadieron que se hace difícil postular a una vivienda a través del Serviu por los numerosos requisitos solicitados y porque para ellos es muy alta la cifra de dinero que se debe tener al momento de la postulación.
Un vez finalizada la reunión, el intendente manifestó que “lo que hemos hecho hoy es escuchar a los dirigentes de la toma quienes han manifestado su descontento y nosotros hemos solicitado que se nos haga llegar un catastro de las familias que hoy se encuentran en el lugar para revisar la situación de cada uno”.
En tanto, el seremi Haro dijo que “los dirigentes de la toma han manifestado su malestar y decidieron tomarse este terreno, el cual hoy pertenece a un privado, pero existe un terreno aledaño que es fiscal. Ellos nos manifestaron sus molestias y en alguna de ellas le encontramos la razón”.