Personal de Carabineros se ha abocado a instruir a las familias y a particulares que, siguiendo una vieja tradición magallánica, salen al campo, durante los fines de semana, y encienden fuego para preparar un asado de cordero o una parrillada o hacer hervir el agua de sus teteras para tomar una bebida caliente.
La medida, que emanó de la Intendencia Regional, siguiendo los pasos de la disposición gubernamental que restringió al máximo el encender fuego en sectores cercanos a bosques y pastizales, fue motivada por los graves efectos del mega incendio que afectó a la zona centro sur del país y que ha destruido bosques nativos, plantaciones de pinos y eucaliptos y zonas agrícolas, abarcando una superficie arrasada de más de 600 mil hectáreas.
Este siniestro forestal ha pasado a ser uno de los más grandes y dañinos de la historia y, aparte del grave daño ambiental y forestal, destruyó miles de viviendas y, lo que es peor y más lamentable aún, cobró la vida de más de una decena de personas en diversas circunstancia, pero vinculadas al mega incendio.
En Magallanes existe prohibición de encender fuego al interior de los parques nacionales, reservas forestales y áreas silvestres protegidas, excepto en los lugares debidamente autorizados y que corresponden a sitios de camping particulares, por ejemplo, los de algunas cajas de compensación o particulares, como en el sector del Río Serrano.
También pueden utilizarse los fogones construidos en el parque Chabunco, parcialmente destruidos por sujetos vandálicos; los de la reserva Parrillar y en aquellos sitios debidamente señalizados de la reserva forestal Magallanes, a unos ocho kilómetros de la ciudad, en las estribaciones del Cerro Mirador.
En este lugar, el riesgo de un incendio de devastadoras consecuencias es mucho mayor que en otros puntos, ya que se sabe de la existencia de numerosos mantos de carbón que, de ser alcanzados por las llamas de una fogata, podrían generar una verdadera catástrofe, de allí la importancia de que si hace fuego, es preciso dejarlo bien apagado cuando quienes estuvieron allí se retiren del lugar.
Los cuidados del bosque, además, deben intensificarse por estos días, ya que parte importante de la dotación de personal y medios de las brigadas contra incendios de la Conaf han ido o regresado exhaustos después de luchar contra los incendios que devastaron parte importante de varias regiones del centro sur chileno.