Punta
Arenas sigue siendo indudablemente la puerta de entrada a la Antártica.
Desde allí, se inician cada año cientos de proyectos científicos que
tienen en su haber, la responsabilidad de encontrar la respuesta del
acelerado cambio climático que sigue afectando al planeta.
En ese contexto, se celebró ayer el vigésimoquinto aniversario de la Base Profesor Julio Escudero, ubicada en la Isla Rey Jorge, península de Fildes. En un principio, la base ofrecía capacidad para albergar 8 personas, contaba con 3 laboratorios que prestaban apoyo a los 13 proyectos científicos que en ese momento, integraban el Programa Nacional de Ciencia Antártica.
Veinticinco años después, Escudero pasó de 95 metros cuadrados a 1.533. Con capacidad para albergar 54 personas, un módulo de laboratorios multidisciplinarios y acuarios para llevar a cabo las investigaciones.
En esa misma línea, el director del Instituto Antártico Chileno (Inach), doctor Marcelo Leppe, destacó que la Base Profesor Julio Escudero, cuenta con un equipo técnico capacitado para desarrollar proyectos de alta complejidad en las más adversas condiciones.
“Por esta plataforma pasan anualmente cerca de 350 científicos. Entre un 15 y 20 por ciento son científicos internacionales que colaboran con nosotros y también, nos facilitan el acceso sin mayores costos a otras plataformas antárticas del resto del continente. Éste ha sido el principal pivote científico de los últimos 15 años y se ha transformado en un punto de encuentro científico para muchos otros países”, recalcó Leppe.
Al ser consultado sobre cómo ve el Inach, que el Continente Blanco esté en los ojos del mundo por futuros descubrimientos, el también paleontólogo y biólogo de profesión señaló que “es muy importante que seamos respetuosos de lo que está ocurriendo a escala planetaria. La influencia Antártica, las teleconexiones que tiene son algo que recién empezamos a vislumbrar. La investigación antártica no solamente es investigación de fronteras o un lugar muy romántico para la ciencia, es un lugar donde está el futuro de Chile y del planeta”, concluyó Leppe.