El concurso fotográfico Ojo de Pez nace en 2004 cuando estudiantes de la Escuela de Biología Marina (BIMA) de la Universidad Austral de Chile (UACh), quisieron dejar un legado al inaugurar el Laboratorio Costero Calfuco a través de una exposición fotográfica permanente, que mostrara sus áreas de estudio. En un inicio solo estuvo dirigido a estudiantes de BIMA-UACh, después a la comunidad UACh para luego abrirse a todas las universidades relacionadas con las Ciencias del Mar y público en general en 2007. Posteriormente tuvo un receso de siete años.

En 2014, el certamen fue retomado por el Instituto de Ciencias Marinas y Limnológicas (ICML) de la Universidad Austral de Chile y el Proyecto Asociativo Regional (PAR) Explora de Conicyt Los Ríos. Con el tiempo, el concurso fue creciendo hasta convertirse en un espacio que hoy convoca a fotógrafos aficionados y profesionales de todo el país.

El ganador del año pasado fue Andrés Contreras Alvarado, por su fotografía titulada “Un vuelo a casa”, la cual muestra un cormorán regresando a su nido junto a un cielo anaranjado a través de un roquerío, formación característica de la playa de Pilolcura, Valdivia. Como premio, Andrés Contreras, aficionado a la fotografía, pudo visitar la Antártica.

Exposición

La iniciativa además de premiar el talento de los participantes, permite crear una exposición itinerante, que hoy fue inaugurada en Punta Arenas, en dependencias del Instituto Antártico Chileno (Inach), ubicado en Plaza Muñoz Gamero 1055. Cabe señalar, que en la convocatoria 2019 participaron más de 500 imágenes de fotógrafos, de las que se seleccionaron las 30 mejores. Estas ahora podrán ser apreciadas por la comunidad en Magallanes, tras haber estado en Valdivia. 

Los interesados pueden visitar la muestra de lunes a viernes, de 9 a 13 horas, y de 14.30 a 17 horas, los viernes el cierre es a las 16 horas. El ingreso es gratuito y la exposición estará abierta hasta el viernes 20 de marzo.

“Es una ventana para un mundo que no es muy familiar para todos, es un mundo que está en constante cambio y son tan frágiles que pueden desaparecer, sin que nosotros nos demos cuenta. Antártica está evolucionado de forma separada del resto del mundo y ha desarrollado formas de vida bastante singulares y esas formas de vida pueden ofrecer una belleza nunca antes vista”, comentó sobre la exposición el director del Inach, Marcelo Leppe.