El año pasado y éste 2020 ha estado llenos de desafíos para los chilenos: el estallido social reveló disconformidad y necesidades de la ciudadanía, mientras que el Coronavirus ha puesto a prueba el sistema de salud el trabajo comunitario y ha hecho pensar sobre las prioridades de cada uno.

La educación ha visto dificultada su labor debido a estas dos situaciones, apoderados, estudiantes y docentes han sentido el cambio y una encuesta realizada por la Red Autónoma de Profesoras y Profesores de Magallanes (Rapromag) revela el sentir de estos integrantes, de las distintas comunidades educativas de la región.

El estudio se desarrolló por 10 días, teniendo como contexto la suspensión de clases presenciales por el Coronavirus y el inicio de las clases online, por lo que esos dos enfoques y el sentir de los encuestados son el enfoque de la investigación. En total participaron más de 1.200 personas.

Los resultados

Los profesores expresan una baja sensación de eficiencia con la educación a distancia, solamente un 6% considera que las plataformas digitales adoptadas han sido correctas y por tanto permiten una educación efectiva. El documento igual revela que más de un 75% de los docentes asegura nunca haber recibido capacitación o formación en herramientas de educación a distancia antes de la pandemia. Finalmente, un dato relevante es que en este mismo grupo más de un 80% asegura no haber recibido ningún tipo de apoyo psico-emocional por parte de sus respectivas instituciones.

El punto anterior es compartido por los apoderados, quienes también indican una baja atención al bienestar psico-emocional del estudiantado y sus familias, sin embargo, destacan el rol de los profesores y lo consideran fundamental para estos tiempos.

Estudiantes

En la encuesta participaron estudiantes desde séptimo básico a cuarto medio. El documento revela que la mayoría de ellos, considera “muy ineficaz” el proceso de enseñanza a distancia, al mismo tiempo que consideran el acompañamiento de sus docentes como “de gran importancia”.

Respuestas como soledad, angustia, ansiedad, preocupación, agobio, encierro y tristeza, entre otras, se repiten al momento de preguntar cómo se han sentido durante el período de confinamiento. Del total, más de un 75% afirma que lo que más extrañan de la educación presencial es la interacción social con sus pares.

Conclusión

El documento concluye diciendo: “Un aspecto en el que existe consenso entre apoderados, estudiantes y docentes es que, si bien de manera transversal se reconoce una ineficacia del proceso educativo en estas circunstancias, se repite la idea de que por el momento lo más importante sería velar por el bienestar de los diferentes miembros de las diversas comunidades educativas, entendiendo que se trata de un contexto anómalo, que de por sí genera muchas preocupaciones adicionales a las familias, estudiantes y profesionales de la educación”.