Luis Almonacid desapareció hace ya doce años, y desde ese entonces su familia no ha estado tranquila.
Según se informó por parte de los familiares, la desaparición de Luis se registra en el sector Río Canelo, donde él trabajaba en labores de pesca, pero su extravío se habría gatillado luego de haber estado en una estancia del sector.
José Almonacid, hermano de Luis, dijo que tuvo contacto hace casi diez años por última vez con la policía, y desde ahí nada más volvió a saber.
“La última vez fue en 2011 o 2012 y de ahí nunca más, yo fui hace un par de años y me dijeron que no podían hacer nada, que la causa estaba archivada, y de ahí nunca más. Con el fiscal a cargo, hablé una sola vez y nunca más supe nada más. En una oportunidad me dijo que no podía hacer nada, porque mientras no hubiese una pista nueva, no podría hacer nada, y me dijo que debería aparecer algo, una chaqueta o zapatos, ellos me decían que sigamos investigando, pero yo no soy investigador”, señaló ayer en conversación con Pingüino Multimedia.
Cuando ocurrió la pérdida de su hermano, señaló que ellos fueron avisados, luego de 15 días desde que habría sido visto por última vez.
“Pasan muchas cosas, cuando yo llegué al sector estaba todo engorroso. A nosotros, nos avisaron como 15 días después. Le avisó a mi otro hermano, que falleció hace un año. El hermano que desapareció trabajaba en la pesca, en el sector Río Canelo, él va para la estancia a tomar café se llevaba bien con la persona que estaba de puestero. Él dice que tomó un café con el cocinero y de ahí sale a las cinco de la tarde a una antorcha y no vuelve más” indicó.
Una de las diligencias solicitadas fue la traída de canes detectores de droga, pero no fructificó. “Fue en octubre, fuimos con la PDI en febrero, y nos habían dicho que iban a traer perros detectores de cadáveres y nunca llegó nada, fueron puros calmantes no más”.
Han pasado los años, su familia ha ido disminuyendo, con el fallecimiento de su padre y uno de sus hermanos, además de tener la hipótesis de que existió alguna pelea, donde habrían asesinado a su hermano.
“Hubo alguna pelea y a alguien se le pasó la mano y eso es todo, yo fui bien empático, porque le dije que lo encontramos, porque en investigaciones me dicen porque, porque las cosas están engorrosas y por ahí viene la mano. Estaban tomando, y quizás lo enterraron o lo tiraron al mar. Han pasado doce años, y siempre en el día a día tengo la esperanza que lo íbamos a encontrar, mi papá murió y mi otro hermano igual, y siempre decíamos lo mismo. Mi papá falleció hace cinco años, esperando encontrar a su hijo”, concluyó.