La sicología financiera estudia el comportamiento de las personas con respecto al dinero. Esta nueva disciplina va mucho más allá de aprender a realizar un presupuesto o un plan de pagos. Es conocerse a sí mismos y la relación que se tiene con el peculio. Al igual que descubrir las emociones o sentimientos asociados con los bienes y la forma en que se maneja el dinero. Dentro de esta nueva disciplina existe un concepto clave, y es la salud financiera personal: la cual se define como la estabilidad de un individuo en todos los aspectos relativos al manejo del dinero. Se sabe que tener un desorden en la economía individual puede tener múltiples consecuencias negativas como son el estrés, depresión, deterioro en las relaciones familiares, disminución de la productividad en el trabajo, etc. Hay dos tendencias psicológicas en el ser humano que influyen de forma negativa en la salud financiera y estas son:

-El principio del placer, que hace que los seres humanos se alejen del dolor y acerquen al placer. Este principio impulsa a la satisfacción las necesidades y deseos.

-La segunda tendencia se conoce como ”miopía temporal”, la cual es un defecto en el razonamiento humano que hace que se valoren menos las consecuencias de las acciones; cuanto más distantes estas lleguen en el futuro. De acuerdo a investigaciones realizadas se sabe que ofrecida la opción entre recibir $ 50.000 ahora o recibir $ 100.000 dentro de un año, la mayoría prefiere los $ 50.000. Ambas predisposiciones hacen que se tomen decisiones erradas, sabiendo que van a traer consecuencias negativas en el futuro, a cambio de un poco de placer en el presente. Es sabida la importancia de ahorrar para el futuro, pero cuesta hacerlo, incluso en cantidades pequeñas, porque resulta demasiado difícil renunciar a la gratificación inmediata de consumir ahora a cambio de la promesa de mayor bienestar futuro. También lo señalado explicaría la mentalidad de comprar ahora y pagar después, raíz de muchos problemas de endeudamiento. Este es un razonamiento muy común, incluso sabiendo que pensar de este modo podría tener un alto costo tanto personal como familiar en el futuro. Tanto el principio del placer como la ¨miopía temporal” priman en aquellas personas que carecen de educación financiera. Existe la denominada terapia financiera, la cual se enfoca en mejorar el bienestar económico de las personas, analizando y trabajando principalmente con el lado emocional del dinero. A la par este tipo de terapia busca evitar que el dinero se convierta en una fuente de conflicto en las relaciones con el resto. Se debería concurrir a terapia financiera cuando: existen problemas con la administración del dinero, cuando se perdió el control sobre las deudas, frente a gastos excesivos o compras que se hacen basadas en la ansiedad. O bien cuando las relaciones han terminado por conflictos con el dinero; o bien cuando una persona, a pesar de ser talentosa, nunca tiene el dinero suficiente ni siquiera para mantenerse a sí mismo.