Después de casi 15 meses del inicio de la pandemia, el deporte y la actividad física han sufrido fuertemente las consecuencias de lo que ha significado el encierro, los altibajos del deporte, con clases vía online durante un año completo, un inicio del 2021 con actividad deportiva de forma presencial en multicancha, para dar un salto en el mes de marzo a los entrenamientos dentro de los gimnasios y, al mes y medio después, volver al punto de partida.
En todos estos procesos por los que ha pasado cada uno de los deportistas y sus disciplinas, ha sido importante la labor de los técnicos y dirigentes por mantener la motivación y reinventándose cada clase por mantener viva la chispa del deporte.En este sentido, importante también ha sido la labor de los gimnasios, principalmente del Español y Sokol, como entes deportivos privados pese a lo duro que ha sido económicamente enfrentar un año de pandemia, pero con la actitud de querer rápidamente encauzarse en los protocolos y con ello reactivar sus entrenamientos, preferentemente en el básquetbol, y sin perder tiempo ni motivación por sus deportistas, como lo están haciendo hoy y sacando provecho del acceso de Punta Arenas a la fase 3.
De este escenario deportivo vivido en pandemia conversamos con Mario Latorre Donoso, actual presidente del Club Deportivo Español, para conocer más detalles de cómo han vivido en la interna el retorno de los entrenamientos de forma presencial en sus instalaciones, el costo económico que ha generado esta pandemia en relación a las horas de arriendo de gimnasios y hacia a dónde se proyecta el club para el presente año. Reconociendo lo difícil que ha sido poder adaptarse a los entrenamientos de forma virtual, mantener la motivación en cada uno de los deportistas, la compleja situación de tener el gimnasio cerrado casi un año, y la alegría de ver a sus deportistas entrenando actualmente de forma presencial y utilizando sus instalaciones.
-Mario, en lo personal, ¿qué ha significado vivir estos cerca de 15 meses de pandemia?
“La
verdad es que nada de fácil, como ha sido para todos. Ha pasado más de
un año y seguimos encerrados, cuidándonos mucho, de forma responsable,
cumpliendo con los protocolos establecidos y con las ansias de que esto
vaya avanzando y estemos cada día mejor”.
-En lo deportivo, ¿cómo ha visto el retorno de sus jugadores?
“Ha sido una maravilla, no hay otra forma de expresar lo que significa ver la cara de alegría de cada uno de ellos por retomar sus entrenamientos, estar parados en el rectángulo de juego y poder compartir su pasión y el entusiasmo por el deporte junto a sus compañeros, después de tanto encierro”.
-En lo administrativo, ¿ha sido un tema complicado para ustedes en el aspecto económico, considerando que mantuvieron casi un año su gimnasio cerrado sin poder tener actividad y, por consiguiente, nada de horas de arriendo?
“Al
tener un año nuestro gimnasio cerrado ha sido duro poder sobrevivir en
lo económico durante la pandemia. Nosotros normalmente manteníamos
compromisos de arriendo con el Colegio Luterano, además del Centro de
Rehabilitación Cruz del Sur, y en lo deportivo, fuera del espacio para
nuestras series menores, tenemos compromisos
con el canal deportivo laboral y los torneos de básquetbol, entonces
comprenderás que esta alta demanda de horas sin duda que repercute
fuertemente en lo económico. Gracias a Dios algo de dinero nos quedaba
en caja hasta antes de la pandemia y hace poco nos arrendó horas por dos
meses el Instituto Santo Tomás, lo que nos ayudará para poder respaldar
los gastos comunes y compromisos del club”.
-¿Los proyectos que se vienen en lo que resta del año?
“En
lo que corresponde a infraestructura vamos a desarrollar algunos
arreglos generales en el gimnasio, que van principalmente a lo que es
techo y camarín, y en lo deportivo queremos seguir avanzando de acuerdo a
como se vaya mostrando esta pandemia; ojalá podamos llegar a fase 4 y
tener antes que se vaya el año una competencia de partidos de
básquetbol, aunque sea una minicompetencia, y sin público, pero
principalmente para que nuestros jugadores puedan volver a sentir esa
adrenalina de competir después de estar encerrados tanto tiempo, y que
además es la esencia del deporte”.
-Para finalizar dejémosle un saludo a toda la gente del deporte en Magallanes, en especial a la gente del Español.
“Como club Deportivo Español, primero que nada agradecer la labor de todos nuestros técnicos y dirigentes por lo que han realizado durante toda esta pandemia y siguen trabajando. Y a todos los deportistas y comunidad magallánica, que se sigan cuidando, que adopten todas las medidas de resguardo para poder salir pronto de todo esto”, finalizó diciendo el presidente del cuadro hispano.