Este jueves el Juzgado de Garantía de Punta Arenas accedió a que se suspenda el procedimiento en contra del imputado de iniciales A.A.M., a quien se le acusaba de cuasidelito de lesiones graves en contra de un niño.
Los hechos ocurrieron en la Unidad de Corta Estadía Infanto-Juvenil del Hospital Clínico de Magallanes. Por resolución judicial, la víctima –que tenía ocho años al momento de los hechos– estaba internada por un cuadro de trastorno conductual.
En ese lugar coincidió con el imputado, quien realizaba su práctica profesional. El individuo presenció una descompensación del niño, quien tuvo un comportamiento de agitación. “Con negligencia culpable e infracción de reglamentos”, según la acusación fiscal, lo tomó violentamente cuando se encontraba boca abajo y le torció uno de sus brazos.
El niño se fracturó el húmero derecho, un hueso superior de la extremidad. Según el Ministerio Público, la lesión de carácter grave tardó más de 30 días en sanar.
Ayer el imputado se conectó al tribunal para que se pusiese término al caso. Se reencontró con la víctima, quien estaba acompañada de su madre. Esta última solicitó que se impusiese la prohibición a que vuelva a trabajar con niños, pero el juzgado desestimó la opción.
Por acuerdo del Ministerio Público y la defensa, la causa quedó suspendida bajo cuatro condiciones. Debe depositar 75 mil pesos al Hogar de Niños Miraflores y someterse a una capacitación para lidiar con el estrés laboral. Además le queda prohibido acercarse nuevamente a la víctima y tendrá que informar sus cambios de domicilio al tribunal.
Si incumple cualquiera de estas medidas durante un año, la persecución penal se reactiva. En caso contrario, el caso se extingue y quedará sin antecedentes.