Aunque arriesgaba ser enviado a la cárcel, un hombre de 42 años quedó con la prohibición absoluta de abandonar su domicilio durante las noches mientras sea investigado por desacato y amenazas en contexto de violencia intrafamiliar.
El imputado tenía la prohibición de acercarse al domicilio de su exconviviente desde el 28 de octubre. Le impusieron la medida cautelar por torcer las muñecas de la víctima, quien quedó con lesiones leves.
Sin embargo, el lunes al mediodía se presentó en su domicilio. De acuerdo al parte policial, la insultó y amenazó de muerte a la salida: “Déjame entrar o te mato. Por tu culpa estuve preso”, dice la constancia.
La mujer denunció los hechos y funcionarios de la Primera Comisaría concretaron el arresto. Le aplicaron la pauta de riesgo y arrojó como resultado “vital/alto”.
Ayer el Ministerio Público formalizó al sujeto por quebrantar la medida cautelar de octubre y por las amenazas. Solicitaron al Juzgado de Garantía que impusiese la prisión preventiva por el peligro inminente hacia la mujer y por el extracto de filiación, que registra condenas por violencia intrafamiliar y manejo en estado de ebriedad.
Según la defensa, concurrió al domicilio por un llamado que la víctima le hizo a partir de una emergencia médica. Además señaló que existían otras medidas cautelares para asegurar la seguridad de la mujer.
El tribunal acogió los argumentos de la defensa e impuso el arresto domiciliario nocturno. Además debe presentarse ante la Comisaría de Carabineros los últimos días de cada mes. Por acuerdo de las partes, el plazo de investigación se fijó en dos meses.