Hace casi una semana el jardín infantil y sala cuna “Vientos del Sur” tuvo que suspender sus clases por un día tras el hallazgo de roedores en el establecimiento. Para ello se limpió el lugar, mediante una empresa certificada del rubro para que pudiera hacer la revisión, reubicación y reposición de cebos en puntos estratégicos del inmueble.
A raíz de esta situación, distintos vecinos informaron a Pingüino Multimedia sobre otra posible plaga, unos metros más separados del jardín infantil, pero colindante a este.
Lo que informaron las personas fue una posible plaga de avispas chaqueta amarilla, ya que la circulación de estas en uno de los inmuebles es visiblemente notoria, saliendo y entrenando del mismo lugar, es decir, debajo de la techumbre o entremedio de las canaletas.
La situación fue confirmada y constatada por el móvil de Pingüino Multimedia, quien gracias a la ayuda de un vecino pudo observar con atención el movimiento de las avispas chaqueta amarilla y entregar imágenes a la comunidad.
Según la información existente sobre las chaquetas amarillas, el tamaño de estas oscila entre los 1 y 2 centímetros. Tienen antenas y cuerpo negro con manchas amarillas, patas cortas, abdomen abultado y poca cintura. Prefieren bosques fríos y cadenas montañosas. Asimismo, suelen vivir en nidos bajo tierra con 90 cm de diámetro y 14 panales o celdillas. Su alimentación está conformada por carbohidratos y proteínas, como la miel, el néctar, las frutas, otros insectos y carroña. Las avispas reinas inician el ciclo cuando son fecundadas en otoño. Sobreviven el invierno hibernando bajo tierra o protegidas en árboles, bodegas y cuevas. Finalmente, emergen en primavera para formar una nueva colonia con capacidad de 20.000 obreras y 175 a 200 reinas.
Estos insectos son agresivos y atacan a las personas que están manipulando carne, pescado o recolectan frutas al aire libre. La picadura es una clara diferencia entre abeja y chaqueta amarilla: mientras la primera pierde el aguijón, la segunda puede picar varias veces.
Esto último, a nivel doméstico, puede ser bastante peligroso, ya que el veneno contiene una alta concentración de antígenos que activan los anticuerpos del sistema inmune. Esto puede ocasionar reacciones alérgicas comunes, como dolor, fiebre, enrojecimiento e inflamaciones, o incluso un shock anafiláctico, que puede desencadenar fallas en riñón, corazón e hígado.