26 de abril de 2024
El tiempo - Tutiempo.net

Avenida España #959
61 2 292900

Súmate a nuestras redes sociales

Ediciones Anteriores

Buscador de noticias

RECIBE GRATIS

Diario El Pingüino todos los días donde quieras.
Lo último de nuestras redes sociales
Columna de opinión

Lapsus línguae

opinion
14/08/2022 a las 14:43
Pablo Oyarzo
914

Hermes Hein, Abogado

Las tajantes expresiones del Ministro Giorgio Jackson, no fueron un lapsus linguae, esto es, un error o tropiezo al hablar, al señalar que “nuestra escala de valores y principios en torno a la política no solo dista del gobierno anterior, sino que creo que frente a una generación que nos antecedió, que podía estar identificada con el mismo rango de espectro político, como la centro izquierda y la izquierda, yo creo que estamos abordando los temas con menos eufemismo y con más franqueza”, “tenemos infinitamente menos conflictos de interés que otros que trenzaron entre la política y el dinero”. En realidad, es toda una declaración de principios, expresa la convicción profunda de una nueva izquierda que sea inspirada en la carta a los Corinthios o en el ejemplo del Che, considera que está poseída de una profunda motivación que los transforma en criaturas nuevas, llamadas a dejar atrás todo lo viejo, porque gracias al estallido social, todo ha sido renovado. No es malo que los jóvenes aspiren a la renovación y al cambio, pero un Ministro no puede descalificar, ofender o imponer un nuevo credo en un lenguaje mesiánico, en que se tiene la pretensión de encarnar al hombre nuevo, cuando en realidad lo que se necesita es que exista un dialogo intergeneracional que nos permita superar el pasado y avanzar en torno a un nuevo ordenamiento constitucional.

Nuestra historia republicana es algo más antigua, no comienza con esta generación y tampoco con aquella que inmediatamente le antecedió. A su vez, los conflictos de interés entre el dinero en la política, se arrastran con evidencias hasta en el Imperio Romano, y de escándalos más o menos, no se salva ni el Vaticano, ni las sociedades construidas por los hombres nuevos en que se buscó superar los vicios del pasado con una revolución cultural, con la higiene social o con una revolución.

La generación que le antecedió no se limita a quienes no superaron los conflictos de interés entre el dinero y la política, en ella están los torturados, los desaparecidos y los viejos que ya sin ambiciones políticas aprobamos el cambio por convicción, sin otra pretensión que a esta generación le vaya bien, que tengan éxito, pero con algo de humildad, porque si hoy están en el Gobierno, es porque le antecedieron varias generaciones que aprendieron la medida de lo posible. Este lenguaje de moderación que hoy incomoda, fue el único posible para las transformaciones de los denostados últimos treinta años de democracia y prosperidad económica, con todas sus limitaciones, incongruencias, contradicciones y una clase política profundamente desprestigiada, inclusive, pero que en todo caso es preferible a una dictadura, donde no solo existieron conflictos de interés entre el dinero y la política, que pueden ser denunciados y enjuiciados, sino que en dicho proceso se despojó el país, de sus recursos y libertades, sin apelación, limitándose la crítica y la libertad de expresión.

En ese contexto, la generación que antecedió al Ministro Jackson, aprendió que no se puede vivir de disculpa en disculpa, que se debe ser cuidadoso en las palabras, que lo importante es tener la capacidad de construir discursos, consensos y acuerdos que sumen y no proferir expresiones que dividan y resten. Sus dichos no fueron un lapsus linguae, sino la prédica de su credo desde el púlpito de un Ministerio, del cual se espera moderación, sigilo e inteligencia política.

Pingüino Multimedia entrega este espacio a su público para la expresión personal de opiniones y comentarios, apelando al respeto entre los usuarios y desligándose por completo del contenido de los comentarios emitidos.

Comentarios


Publicidad