El precio de las gasolinas y los combustibles volvió a subir ayer en todo el país, lo que va generando en la región un profundo desencanto en la población, particularmente en las zonas más extremas.
Ayer, el concejal RN de Porvenir, Carlos Soto, se refirió al impacto que han causado en la capital fueguina estas alzas y la decepción existente.
“Desde el sentido común, la gente siempre opina y dice lo mismo, es como un engaño porque primero se bajan dos o 10 pesos y luego se sube mucho más, es una ironía generalizada para la gente. Obviamente repercute en todas las personas, porque al final nuestros alimentos se transportan mediante camiones, vehículos, sobre todo a esta zona y, aumentando el combustible y el costo de los fletes, todo repercute directamente en el bolsillo del consumidor, de las personas, sobre todo, de la gente más vulnerable, que es la que sufre más en este asunto”.
-¿Cómo se está sintiendo esta situación en Porvenir?
“Una de las cosas que la gente quiere y es lo que dijo en algún momento el senador Kusanovic es eliminar el impuesto específico para esta región tan extrema como es Magallanes, pero el Presidente Boric fue claro en su campaña que no iba a eliminar el impuesto específico a las bencinas. Así que la gente que votó por él, bueno, hoy estamos viendo esas consecuencias. Es lamentable para Magallanes, donde tenemos las bencinas más caras de Chile”, indicó.
Precios
Ayer, en la capital fueguina, el precio de la gasolina sintió el alza generalizada de casi 10 pesos anunciada el día anterior por ENAP en todos los combustibles, incluido el Diésel.
Es así que el valor de la gasolina de 93 octanos llegó a 1.411 pesos el litro; la de 95 octanos, $1.445 pesos el litro; y la de 97 octanos, $1.470 el litro. El Diésel, en tanto, se ubicó en $1.291 pesos el litro.
En Punta Arenas, el precio de la gasolina de 93 octanos subió 11 pesos en las estaciones de autoservicio y 10 pesos en las demás bencineras hasta un máximo de $1.319 el litro.