Fueron cuatro jornadas marcadas por la fantasía, la magia, la música, el color y la gastronomía de una época de antaño, tan fuertemente recordada por la Sociedad Tolkien Magallanes, en la XI Versión de la Feria Medieval en Punta Arenas, un espacio de encuentro familiar, que se convirtió en un entretenido panorama estival.
54 expositores dieron vida a este evento, quienes debían ornamentar sus puestos con la temática de esta versión, “La Fiesta de la Cosecha”. Bajo este contexto, además se desarrolló, durante todas las jornadas, una obra de teatro, que contó la historia de familias que se reencontraron tras una peste, donde el drama, la fantasía y sobre todo el amor, fueron los protagonistas.
Talleres y concursos
Las jornadas también tuvieron talleres como el de Danza Circular, o concursos con el torneo de espada, la verdura más grande, resultando como ganadores empatados a Doña Mila de los campos de la Patagonia y la familia Montaña.
En la penúltima jornada se desarrolló el concurso al mejor traje. Con elegancia y astucia desfilaron guerreros, doncellas, elfos, piratas, hobbits y orcos. Finalmente, el público premió en empate a una hechicera y un vikingo.
En la noche del sábado se vivió la Noctum Festum, un espacio para el baile y la diversión, que congregó a muchas personas en la Taberna La Doncella Olvidada.
Finalmente, ayer se realizaron competencias infantiles, un torneo de espada, se presentó Kaitek con danza tribal y se concluyó la linda historia de amor de “Romeo y Violeta”.
Se estima que fueron más de cuatro mil personas quienes llegaron hasta el Liceo Luis Alberto Barrera, para participar de la Feria Medieval. Es por esto que, para la organización, el evento fue todo un éxito, cumpliendo con las expectativas de entregar una oferta cultural de calidad y diferente, donde grandes y chicos disfrutaron por igual de toda la magia del Medioevo.