Luis Arnoldo Molina Mendoza de 19 años, tras ser formalizado por homicidio simple en el desarrollo de consumado, fue enviado a la cárcel como medida cautelar por considerarse un peligro para la sociedad y existir riesgo de fuga. En ese momento, el magistrado argumentó la decisión apuntando al alto prontuario criminal del joven, con delitos cometidos cuando era menor y mayor de edad. También jugó en contra del imputado, el hecho de que estuvo escapando de la policía por varios días.
El joven es acusado de asesinar a Ariel Teca Lepío de 24 años, quien murió tras recibir una certera puñalada en el tórax. El hecho habría ocurrido en la madrugada del 27 de enero, a los alrededores de una vivienda de calle Almirante Señoret, luego de que un intercambio de droga saliera mal.
Tras haberse contactado por Whatsapp, la víctima entregaría cocaína, mientras que el imputado facilitaría marihuana, se produce una discusión y la agresión que termina con una persona fallecida, sin embargo, en este punto hay dos versiones.
El imputado asegura que fue amenazado por la víctima y su amigo, donde cada uno tenía un cuchillo, dando entender que querían robarle la marihuana. El joven investigado dice que saca un arma de fogueo, dispara al aire, observa que el amigo de Ariel Teca intenta apuñalarlo y lo toma de la mano, se abalanza sobre la víctima, dando una certera apuñalada en el pecho.
Por su parte, el testigo y amigo de la víctima, asegura que el imputado se acercó de forma intimidante y exigió la droga inmediatamente, dice que todo pasó muy rápido y escuchó un disparo; comenta que el joven investigado sale corriendo, mientras que su amigo se aleja del lugar, quedando tirado en el piso para luego ser trasladado al hospital en donde fallece.
Se acordó un plazo de investigación de 120 días, por lo que lo anterior aún debe ser esclarecido y está bajo pericias de las policías.
Solicitud
Como parte de los derechos legales, la defensa del imputado solicitó discutir nuevamente la medida cautelar impuesta, buscando que se aplique una menos severa, argumentando que debido a que el sujeto estaba bajo amenaza, fue segregado del resto de la población penal finalmente provocándole problemas sicológicos, principalmente ansiedad. Ante esto, se pidió el arresto domiciliario total o dejar sin efecto el resguardo especial e integrarlo al resto de la población, siempre con los cuidados necesarios debido a lo expuesto anteriormente. Esto último fue solicitado por el imputado, conversado previamente con su abogado, ya que considera que su vida ya no peligra.
Debido a que no ha habido variaciones, el magistrado mantuvo la prisión preventiva de Luis Arnoldo Molina Mendoza, oficiando a Gendarmería para que sea integrado al resto de la población penal.