La pregunta siempre se la hacemos a las máximas autoridades nacionales que visitan la Región de Magallanes y Antártica Chilena. Incluso se la hacemos cada vez que podemos al Presidente que esté de turno en nuestro país: ¿Cómo reencantamos a los chilenos para que se vengan a trabajar a la Patagonia? ¿Por qué no crece la población de la Región de Magallanes y Antártica Chilena? El Presidente Gabriel Boric debe saber mejor que nosotros las respuestas para ello. Las cifras de aumento demográfico del Censo 2017 dan a entender que nuestra alza es bajísima. Nuestro territorio patagónico chileno ha sido lento en su crecimiento demográfico, en comparación con el vecino país, que comenzó a desarrollarse con mano de obra de connacionales que tuvieron que cruzar la frontera para su propia subsistencia. ¿Por qué este lento crecimiento humano? Las respuestas pueden ser muchas, pero nos quedamos en general con la falta de visión futura de los gobernantes de nuestro país; de precarias políticas públicas, las que no se prolongan en el tiempo para que tengan un real incentivo para inversores, emprendedores, pequeños y medianos, para la propia gente que la habita. Magallanes como región isla se ha favorecido a pequeña escala con el puerto libre, que nos benefició por seis años, desde 1956 a 1962, y luego la Ley Lorca, de iniciativa del senador Alfredo Lorca Valencia, con la creación de la Corporación de Magallanes. La Zona Franca y las leyes de excepción, que se caen en el tiempo, no han sido suficientes para el desarrollo humano sostenido en la Región de Magallanes y Antártica Chilena. Las reglas de estas últimas se cambian constantemente con fechas de términos insuficientes, principalmente para los inversionistas. Reiteramos que el Presidente magallánico, Gabriel Boric, lo sabe y confiamos en que hará algo por su región.